A dos meses de las PASO, se recrudeció el conflicto dentro del núcleo duro del kirchnerismo ante la imposibilidad de una re-reelección de Cristina Fernández de Kirchner: después de que Eduardo Jozami pidiera a Máximo Kirchner como vicepresidente, el director de la Biblioteca Nacional dijo que “para construir una carrera política, lo mejor sería que empiece por una diputación”.
El sociólogo salió al cruce entre intelecuales K y aclaró que no conoce al hijo de la Presidenta. Aunque dijo que el discurso que dio el año pasado en la cancha de Argentinos Juniors fue "más interesante de lo que hubiera supuesto", advirtió: “No espero es que tenga un cargo de esa relevancia (el de Vicepresidente), porque sería una operación política extraña, un poco forzada a mi juicio", aseveró a Radio Rivadavia.
González sostuvo que las carreras políticas "no son lineales", y que debe existir "una acumulación y una pedagogía de saberes que solo lo construye el tiempo". Con respecto a la contienda electoral, el titular de la Biblioteca Nacional calificó de "confrontación muy dramática para la historia nacional" que la sucesión presidencial se dirima entre Scioli y Macri.
"No me gustaría tragar sapos, la política tiene condicionamientos a veces terribles. Si ocurriera la circunstancia Scioli, sería una confrontación muy dramática desde el punto de vista de la historia nacional, porque estaría enfrente Macri, y son dos personajes con muchos puntos en común, y con otros matices. Entonces un vastísimo drama nacional ocurriría alrededor de esos matices", advirtió.
Además, calificó a Scioli como "un personaje que está ahí, que como se dice no le entran las balas, que ha establecido un estilo no confrontativo", y pese a que sostuvo que "la política nacional es confrontativa desde Mariano Moreno en adelante", admitió que "es justo que una porción importante de la población rechace las polémicas".
