Jorge Asís no admite terminos medios. Ex periodista de Clarín y funcionario menemista, no tiene empacho en criticar al multimedio y al Gobierno por igual: dice que ambos deberían desaparecer y que ningún presidente concentró tanto poder como Cristina Fernández de Kirchner. Como una lúcida máquina de tirar sentencias sobre la política nacional, asegura que la muerte de Néstor Kirchner fue una "genialidad estratégica" y que el oficialismo genera su propia destrucción.
"Nunca hubo un presidente que concentrara tanto poder de decisión, ni Perón, ni Menem ni Kirchner", afirma el escritor en diálogo telefónico con Perfil.com. "Nadie sabía quién iba a ser su compañero de fórmula 15 minutos antes de anunciarlo", añade. Esa concentración es "símbolo de fortaleza pero también de la vulnerabilidad del proyecto: todos dependen del vestidito negro de Cristina".
El buen momento del kirchnerismo ("hoy Cristina saca entre el 55 y el 57 por ciento", aventura) "lleva las claves de su propia destrucción". Asís cree que la atomización de la oposición "se repite en el oficialismo pero queda simulada por las cajas; eso permite que convivan juntos polos opuestos como Verbitsky y Soria, D'Elía y Szpolski".
La re-re. "Una gran lección que le dejó Néstor a Cristina es no ir por la reelección sin tener garantía de continuidad", explica a Perfil.com, "A él se le niega la posibilidad de continuidad en 2006 con el fracaso reelectoral de (el gobernador de Misiones Carlos) Rovira", abunda.
Por eso, un intento de eternización en el poder no sería de extrañar, aunque, según el periodista, ningún funcionario lo admita en público antes de las elecciones. "Yo no rechazo un gobierno parlamentario, no descartaría ninguna reforma, pero como un gobierno parlamentario serio, no una cuestión de ver si podemos conseguir cuatro años más", comenta.
Un año sin Néstor. "Yo soy muy respetuoso de la familia y de lo personal, pero la muerte de Kirchner fue una genialidad estratégica desde el punto de vista político", sostiene Asís. Así surgió el "vestidito negro" del luto y el crecimiento en las encuestas del kirchnerismo. "En la trancisión ella se manejó muy bien, se la ve más segura", agrega.
Sin embargo, el ex presidente dejó un vacío político: "No creo que Boudou pueda llegar a suplir el espacio que ocupaba Kirchner", opina. Asís considera que "hoy hay cinco personas que trabajan en el Gobierno": El secretario de Hacienda Juan Carlos Pezoa, a cargo de la Economía mientras Boudou sale de campaña; el secretario de Industria, Eduardo Bianchi; el ministro de Agricultura, Julián Domínguez; el de Planificación, Julio De Vido; y el secretario de Comercio, Guillermo Moreno.
Clarín. Asís trabajó como periodista en el diario durante los años setenta. Al irse, en 1984, escribió Diario de la Argentina, una novela que relataba la intimidad del matutino en clave de ficción. El atrevimiento lo condenó al destierro de algunos medios por varios años. Tras su pasó por el gobierno de Carlos Menem, desde principios del milenio se dedicó a los programas políticos de cable y al periodismo autogestionado en su portal de internet.
Pero el periodista no toma partido ni por el oficialismo ni por el multimedio: "En una guerra entre el Gobierno y Clarín, lo mejor que le podía pasar a la Argentina es una derrota de los dos", opina, y agrega que "Clarín fue uno de los grandes derrotados del 14 de agosto".
"Algún replanteo van a tener que hacer, que te gane este gobierno es humillante, Clarín tiene el Kirchner que se merece", sentencia.
El multimedio "no fue preparado para la guerra. Yo no le critico haber peleado, sino haber peleado mal. (El CEO del grupo, Héctor) Magnetto conseguía todo por pura presencia, todos fuimos cómplices de esa sentencia de que nadie soporta cuatro tapas en contra de Clarín. Hasta que (el empresario Raúl) Monetta le dijo a Kirchner 'tenés que aguantarte 30 ó 35 tapas, más que eso no tienen".
Asís reconoce que el oficialismo le ofreció reeditar Diario de la Argentina en plena guerra con Clarín, pero "no le di la menor importancia; para cargarme a Clarín no necesité un gobierno, eso sería jugar con la cancha demasiado inclinada. Nunca la voy a republicar por un favoritismo gubernamental, pero si alguna editorial quiere, les diré que sí".
El heredero. Para el escritor, los candidatos a suceder a Cristina son su futuro vice, Amado Boudou, y el gobernador bonaerense Daniel Scioli. "Boudou es casi un discípulo de Scioli, que es el más aventajado", dice a Perfil.com. Pero "Cristina no quiere herederos a la vista. Hoy no se discute quién es la dueña de los votos, los gobernadores son meros canales que le aportan agua", reflexiona.
"Scioli arrastra votantes que no quieren a Cristina. En el peronismo, que es más grande que el kirchnerismo, no todos creen en serio el discurso de Cristina, ni se volvieron progresistas", sostiene, y anticipa que el kirchnerismo "va a cometer el error, que ya cometen, de precipitarse" sobre el gobernador.
Oposición. Desde su portal, Asís anticipó la caída en desgracia de la mayoría de los candidatos no-kirchneristas, siguiendo de cerca la interna del Peronismo Federal. A pocos días de las elecciones generales, afirma que sólo "quedan bien parados Binner y Macri, y queda indemne Alberto Rodríguez Sáa, el resto tiene una situación bastante desfavorable". Y remata parafraseando una sentencia de Mario Puzo (autor de El Padrino): "En esta sociedad se es mandíbula o se es bocado; muchos que fueron mandíbula, después del 23 de octubre serán bocado".
(*) De la redacción de Perfil.com.