Jorge Brito negó este lunes haber intervenido en la financiación para el salvataje y compra de la imprensa Ciccone Calcográfica, al ser indagado por el juez Ariel Lijo en la causa en la que está acusado junto al detenido ex vicepresidente Amado Boudou.
El titular del Banco Macro, que pidió licencia de su cargo a mediados de noviembre, presentó un escrito en el juzgado en el cual negó haber participado del financiamiento para comprar la empresa. Además, sostuvo que no tiene relación con otros acusados, entre ellos el ahora "arrepentido" Alejandro Vandenbroele, según explicaron fuentes del caso a la agencia de noticias Télam.
Tras presentar su escrito, de ocho carillas, Brito adelantó, de manera oral, que ampliará su declaración indagatoria cuando se levante el secreto de sumario en la causa y conozca más en detalle las acusaciones en su contra. Además, dejó "expresa constancia de su disposición a prestar colaboración" con la Justicia para esclarecer la investigación.
El banquero arribó a los tribunales federales de Retiro poco antes de las 11 y subió al tercer piso sede del juzgado de Lijo. Allí se cumplió el trámite ante el magistrado y el fiscal del caso Jorge Di Lello. Brito dejó el escrito, no respondió preguntas y se retiró sin hacer declaraciones.
Brito pidió licencia como presidente del Banco Macro hace dos semanas, luego de que las acciones del banco se desplomara 14% en Wall Street y en el Merval ante los trascendidos.
Ahora la mira en Comodoro Py está puesta en la indagatoria de mañana de Ricardo Echegaray, ex titular de la AFIP, acusado de habilitar un plan de pago de deudas para evitar la quiebra de Ciccone. "No se movía un papel sin que él lo supiese. Todo mi accionar era consensuado o instruido por él", declaró su ex jefe de Gabinete, Rafael Resnick Brenner, cuando fue citado a dar explicaciones.
