Juan Cabandié: Máximo Kirchner puede ser candidato
Es nieto recuperado y amigo del hijo del ex presidente, con quien milita en La Cámpora. El
debate sobre el
uso político de los Derechos Humanos.
|
Alfredo Nardini
Juan Cabandié posa divertido para las fotos. “Después de esta sesión estoy listo para una producción fotográfica en la isla de Caras”, se ríe, y dice que si pudiera elegir le gustaría ir con Flavia Palmiero: “Pero es solo una fantasía –advierte-. Estoy bien con mi mujer y mi bebé”.
Cabandié es hijo de desaparecidos, legislador porteño por el Frente para la Victoria y el nieto número 77 recuperado por las Abuelas de Plaza de Mayo. Nació en la ESMA y hace cuatro años recuperó su identidad a la vez que descubría a Néstor Kirchner. “Es mi guía”, dice. Milita en La Cámpora, la agrupación que formó el hijo presidencial Máximo Kirchner (31), su amigo. Y además es secretario general de la Juventud Peronista, un cargo que le ofreció el ex presidente cuando tomó las riendas del PJ.
Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
En su despacho de la Legislatura porteña tiene una foto de sus padres desaparecidos, Damián y Alicia, cuando tenían 16 y 19 años. “Cada vez que la veo me los imagino grandes, ahora tendrían como cuarenta y pico. Es mi forma de construir la autoridad paterna”.
- ¿Cómo se hizo amigo de Máximo Kirchner?
- Trabajaba en el Ministerio de Desarrollo Social y en un viaje a Río Gallegos lo conocí. Nos contactamos y ahí empezó una relación política que se terminó convirtiendo en amistad. Nos hablamos por teléfono seguido. Somos de la misma generación y es lógico que él tuviera interés en nuestras historias. El está muy formado políticamente y le interesa la cuestión de los Derechos Humanos. Muchas veces me pregunta por otros nietos recuperados y quiere saber cómo están.
- ¿Lo visita?
- Hace mucho que no voy al sur, sobre todo desde que soy legislador porteño. Antes iba a verlo a Río gallegos, pero nunca paré en su casa, dormía en un hotel. Máximo es mi amigo, es una de las personas que invitaría a comer a mi casa.
- ¿Lo ha invitado?
- Sí, vino a casa, hicimos asados y charlamos.
- ¿Cree que puede ser candidato?
- Bueno, eso habría que preguntárselo a él.
- ¿Pero usted cómo lo ve?
- Hay muchos jóvenes que tienen una buena formación para ser candidatos. El corre con la ventaja de haber crecido y vivido en un ámbito lleno de política y es lógico que tenga una tendencia a volcarse a lo público. Máximo puede ser candidato, al igual que muchos jóvenes que tienen talento e ideas para aportar.
La entrevista completa en la última edición de la Revista Noticias .
