Definiciones en diversas causas que involucran a Julio De Vido podrían darse durante el transcurso de este año. Si bien el exfuncionario sumó una gran victoria judicial con su absolución en el juicio por la Obra Pública cuya apelación apunta el fiscal Diego Luciani, continúa en el banquillo de los acusados en una causa por la valija de Antonini Wilson de la que pidió pase a otro fuero. Sin embargo, otras causas elevadas a debate oral donde se encuentra imputado estarían en condiciones de iniciar a lo largo de este año.
El exministro de Planificación tuvo su primera condena en la causa por la tragedia ferroviaria de Once. El Tribunal Oral Número 4 dispuso la pena de cinco años y ocho meses de prisión, pero nunca estuvo detenido por esta causa. De hecho, el fallo no está firme, tiene pendiente la definición de un recurso de queja en manos de la Corte Suprema de Justicia desde hace casi dos años.
De Vido estuvo cumpliendo prisión preventiva en el complejo federal de Marcos Paz por la causa Río Turbio, en manos del Tribunal Oral Número 1 quien posteriormente ordenó excarcelarlo. En ese expediente está acusado junto a Roberto Baratta de defraudación al estado por el desvío de al menos 264 millones de pesos que estaban destinados a la mina de carbón ubicada en la provincia de Santa Cruz. El tribunal está finalizando la fase preparación y de digitalización de la documentación con miras a fijar fecha de inicio del debate.
En abril del año pasado el TOF 6 lo condenó a cuatro años en la denominada “megacausa”, cuyo principal involucrado era el recientemente excarcelado exsecretario de Transporte Ricardo Jaime. Los jueces sostuvieron que en uno de los expedientes en los que se investigaba la compra de trenes chatarra a España y Portugal, De Vido era el máximo responsable en la firma de contratos con ambos países que obligaron al Estado a desembolsar cifras millonarias en una compra fraudulenta.
De Vido se encuentra a la espera que el Tribunal Oral Número 4 disponga de la fecha de inicio del juicio por la causa conocida como Skanska I, en la que se investiga una serie de irregularidades en la ampliación de los gasoductos y direccionamiento del proceso licitatorio que ganó la firma Odebrecht. Por otra parte, en Skanska II, el TOF 2, mismo que lo absolvió en la causa Vialidad, ultima detalles para determinar el inicio del juicio en el que también está acusado, pero junto al exsecretario de Energía, Daniel Cameron por negociaciones incompatibles con la función pública”, al considerar que favoreció a la constructora brasileña en contratos para la ampliación de los gasoductos Norte y Sur entre 2006 y 2008.
Recientemente, la Cámara Federal de Casación allanó el camino para la realización de otro juicio en el que De Vido está imputado. Se trata de la causa por supuestos pagos de dádivas también de Odebrecht para la adjudicación de las obras de dos plantas potabilizadoras en Paraná de las Palmas, ubicada en el partido de Tigre y en Berazategui. Con esto, el Tribunal Oral Número 7 está en condiciones de avanzar con la realización del debate.
Finalmente el exfuncionario apunta a la invalidación del juicio por el ingreso de casi 800 mil dólares en una valija que traía el empresario venezolano Guido Antonini en 2007. A través de sus abogados Maximiliano Rusconi y Gabriel Palmeiro, reclamó la nulidad del requerimiento elevación a instancia de debate, la falta de acción por inexistencia de delito y por la garantía de plazo razonable.
Asimismo, y en el marco de la etapa de cuestiones preliminares, exigió que la causa en la que está acusado de intento de contrabando agravado de divisas debe ser investigada por el fuero electoral federal tras los dichos del propio Antonini Wilson, quien ante la Justicia estadounidense sostuvo que el dinero estaba destinado para la campaña electoral de Cristina Fernández de Kirchner.