En la misma semana que explotó el Audigate de Amado Boudou, después de que se hiciera público que el vicepresidente registró su auto en la casa de la abuela de un policía que trabajó para él cuando era funcionario de la Anses, su novia, Agustina Kämpfer, decidió dejar de manejar el auto alemán que le pertenece a su pareja.
Hasta hace unos días todavía se movía en el Audi A4 3.2 Quattro, el mismo que conducía el día que le rompieron un vidrio para robarle dos computadoras y un disco rígido, que es propiedad de su novio Boudou, episodio que investiga la Justicia Federal.
Pero esta semana se la pudo ver arriba de una Ford Focus blanco polarizado. Llegó a eventos y reuniones sentada en el asiento de atrás, oculta entre los vidrios polarizados.
Es que ahora Kämpfer tiene auto y chofer “oficial”.
Según pudo comprobar PERFIL, la patente del auto –que no será publicada por seguridad– está a nombre del Senado de la Nación. Es parte de una flota de unos sesenta autos que están a disposición de los presidentes de los bloques y de los máximos responsables de la Cámara. Y es, precisamente, uno de los cuatro vehículos que tiene asignada la Presidencia de la Cámara alta, a cargo de Amado Boudou. Uno es de uso casi exclusivo del vicepresidente, dos son de la custodia y otro se usa como para tareas especiales, como ir a buscar funcionarios que llegan de otro país. Pero esta semana ofició de transporte para la novia del vicepresidente.
No sólo eso: fuentes del Senado confirmaron además que uno de los choferes de la Cámara alta fue asignado para llevar y traer a Kämpfer. Argumentaron que se trata de personal que está a disposición de la Presidencia del Senado, o eventualmente de los presidentes de los bloques de senadores.
Esta semana trascendió que Amado Boudou tenía registrado su Audi A4, que solía usar su novia, en la casa de una familia que no lo conocía y que encima tenía que romper todas las multas que llegaban por exceso de velocidad y mal estacionamiento. Después, según Infobae, se supo que en ese domicilio del barrio de Villa Urquiza, donde estaba anotado el auto –Zado 3200– vivía la abuela de Adrián Costantino, un oficial de la Policía Federal que fue jefe de seguridad de Ramón Palito Ortega y empleado de la Anses. Allí se habría conocido con Boudou, cuando el ahora vicepresidente ejercía la titularidad de ese organismo en 2008, antes de ser ministro de Economía.
La novia del vice le ha confiado a algunos conocidos su preocupación por la situación procesal de su compañero. Le incomoda también que la explosión mediática del caso Ciccone la ha alejado aún más de sus planes originales como periodista. Muchos que antes prometieron darle trabajo ahora lo piensan dos veces o le sugieren que será más adelante.
El frente judicial tampoco ayuda. Agustina está imputada en la causa por enriquecimiento ilícito que sigue el juez Ariel Lijo en la que se investiga a Amado. Además ahora tiene que dar explicaciones por el confuso episodio en el que le robaron dos computadoras y un disco rígido del Audi del vicepresidente.
