La provincia de Buenos Aires decidió sumarse a las restricciones horarias que recomendó el Gobierno nacional para contener el avance de los contagios de coronavirus y a partir del lunes suspenderá la actividad comercial, cultural y recreativa entre la 1 y las 6 de la mañana, con excepción de los rubros declarados como esenciales.
El plan de acción bonaerense mantiene el sistema de fases vigente para la habilitación de actividades y servicios y solo los que están en Fase 5, que son 17 municipios del interior provincial, quedarán afuera de las restricciones que se aplicarán para aquellos en las Fases 3 y 4 de distanciamiento social.
Al igual que en la Ciudad de Buenos Aires, se dispuso la reducción de actividades sociales, recreativas y familiares a grupos de hasta 10 personas, sin distinción entre espacios cerrados y abiertos.
Pero uno de los puntos centrales del plan provincial apunta a combatir las denominadas “fiestas clandestinas” que proliferaron al ritmo del avance del verano y será vía el establecimiento de multas de hasta más de 3 millones de pesos tanto para los asistentes como para los organizadores y propietarios de los inmuebles donde se realicen, que se suman a las sanciones ya previstas en el Código Penal. Para realizar denuncias está habilitado el 911 y una nueva línea dispuesta por el Ministerio de Seguridad que tomará reportes durante los viernes, sábados y domingos después de las 22 exclusivamente para este tipo de delitos.
También habilita a autoridades municipales a controlar la correcta utilización de tapabocas y la aplicación de multas correspondientes en caso de que se no se verifique su uso en la vía pública como es obligatorio.
La definición de la administración del gobernador Axel Kicillof llegó un día después de la publicación del decreto y del establecimiento del nuevo cronograma de funcionamiento de actividades que difundieron casi todas las provincias. Es que en Buenos Aires preocupa especialmente el desarrollo de la temporada turística en la Costa Atlántica y las autoridades hicieron contacto con la mayoría de los intendentes para obtener un diagnóstico antes de encarar las restricciones.
En ese marco, Kicillof y el ministro de Producción, Augusto Costa, se reunieron el viernes con los jefes comunales de los municipios de la costa para intentar combinar las medidas de prevención contra el covid con la continuidad de las actividades comerciales y turísticas.
“Hoy no hay margen para un relajamiento. Si queremos seguir con la temporada y con la recuperación económica y la actividad productiva de los últimos meses tenemos que seguir cuidándonos y esa es la principal cuestión que tenemos que tener en mente. Desde los municipios y desde el Gobierno de PBA vamos a reforzar los controles y las medidas para fiscalizar los cumplimientos de los protocolos pero hay algo que es imposible de dejar de lado que es que la gente se cuide porque de esa forma se cuida al trabajo y a la producción”, señaló Costa al término del encuentro con intendentes.