Sin vueltas, el diputado del Frente para la Victoria, Carlos Kunkel, reconoció que los cambios de gabinete que se sucedieron estos días tras el regreso de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner respondieron a la derrota del kirchnerismo en las elecciones legislativas de octubre, en especial en la provincia de Buenos Aires.
"Hemos leído atentamente el resultado electoral, perdimos un millón de votos, por eso hicimos todos estos cambios", aseguró en una entrevista en radio La Once Diez.
Kunkel se refirió así a los cambios que incluyeron fuertes apuestas, como la renuncia del secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, además del ascenso de Axel Kicillof como nuevo ministro de Economía y la asunción del gobernador chaqueño en licencia Jorge Capitanich en la Jefatura de Gabinete.
Y lo dijo el primer día que los nuevos funcionarios asumieron sus funciones, y que tanto Capitanich como Kicillof dieron por su cuenta conferencias de prensa, en un claro gesto político.
Sobre Moreno, señaló: "Nadie le puede imputar nunca que haya tenido una actitud irregular o una actitud que pusiera en duda su honestidad y su transparencia", señaló Kunkel en referencia al exfuncionario. Y ante la pregunta por su fama de "hombre duro" en el manejo de los precios y de la inflación, señaló: “Fue una gestión necesaria para cumplir una etapa en nuestro Gobierno y por eso duró tanto".
En cuanto a la designación de Capitanich, Kunkel señaló: "La elección del Coqui es una apuesta para adecuar el funcionamiento del Gobierno en los próximos dos años en lo que consideremos oportuno y necesario".
"Se lo nombra al Coqui para que en momentos en que hay que profundizar determinadas medidas y encontrar diálogos con determinados sectores, él es la persona indicada", argumentó.
