La ex secretaria de Medio Ambiente, Romina Picolotti, quien llegó al Gobierno de los Kirchner de la mano del ex jefe de Gabinete, Alberto Fernández, debió soportar varios sofocones que fueron marcando sus 880 días de gestión.
El primer gran problema para Picolotti fue una denuncia por “malversación pública y defraudación” al Estado nacional efectuada por Adrián Pérez, diputado nacional por la Coalición Cívica, tema por el cual aún se encuentra procesada.
El asunto había salido a la luz a raíz de una nota periodística publicada por el diario Clarín en donde se dejaba entrever que la funcionaria había contratado a familiares y amigos para trabajar en la Secretaría con sueldos exorbitantes que iban desde los 4.000 hasta los 12.000 pesos. Y que, además, había alquilado injustificadamente aviones privados para sus viajes por el país, por sumas que rondarían los 20.000 pesos.
La investigación fue un escándalo, la funcionaria presentó sus excusas por escrito y tuvo que salir su padrino político, Alberto Fernández, a dar la cara por su protegida. Fue así que el ex jefe de Gabinete armó una conferencia de prensa para explicar punto por punto las acusaciones que pesaban sobre Picolotti. Luego, llegaría otra denuncia más por “incumplimiento de deberes como funcionaria pública”.
El tema del Riachuelo y su saneamiento también fueron una mancha (más) en su gestión. Mientras la funcionaria y el Gobierno le echaban la culpa a las empresas que concretan actividades con sustancias tóxicas cerca de la cuenca del río Matanza-Riachuelo, la Corte Suprema de Justicia ordenaba al Estado la limpieza total y establecía plazos.
En un fallo de 29 páginas, el Tribunal consideraba “urgente” la recomposición de la cuenca y advertía que sancionaría con multas diarias si no se cumplía la disposición en los “plazos perentorios”.
Otro escándalo que estalló durante la gestión de Picolotti fue la noticia publicada por la Revista Noticias de que el hermano de la ahora ex funcionaria, Juan Picolotti, alquilaba un piso en el complejo Le Parc de Puerto Madero a un costo de 4.500 pesos por mes.
Además, la funcionaria también fue muy cuestionado por su gestión del problema con las papeleras frente a las costas de Gualeguacyhú y los incendios de pastizales en el Delta.
