La Iglesia Católica salió a respaldar la denuncias sobre las irregularidades ocurridas en el Hogar San José Obrero, del barrio porteño de Chacarita, que generaron la investigación judicial en la que se dispuso el desalojo de los menores que estaban al cuidado de la "Fundación Felices Los Niños" del cura Julio Grassi, finalmente suspendido ante los incidentes producidos en la puerta del lugar entre un grupo de personas y la Policía.
El aval de la Iglesia a la medida ordenada por la jueza Myriam Rustan De Estrada se desprende de un comunicado que se leerá este fin de semana en todas las parroquias, iglesias y establecimientos católicos, que lleva la firma del Consejo Episcopal de la Arquidiócesis de Buenos Aires que preside el cardenal Jorge Mario Bergoglio. A continuación, el texto completo:
Con respecto a los hechos ocurridos esta semana, vinculados al Hogar San José Obrero, de la Fundación Felices los Niños, queremos aclarar algunos puntos:
1. El Obispo, Monseñor Horacio Benites Astoul (quien comunicó los hechos del hogar) y las autoridades de la Escuela Santa Teresa de los Andes, dependiente del arzobispado de Buenos Aires, obraron correctamente.
2. Luego de un informe presentado por la Vicaría de la Educación del Arzobispado, y considerando la seriedad de los hechos, se realizó un trámite al cual están obligadas todas las personas e instituciones cuando esos hechos suceden con menores. Este trámite consiste en una presentación o comunicación ante la justicia. No es una denuncia, sino que se comunica a la justicia lo conocido en el informe para que ella actúe si lo cree necesario.
3. La Jueza interviniente y el Defensor de Menores consideraron oportuno iniciar una investigación a través de personal idóneo, profesionales, peritos y psicólogos especialistas, encontrando una serie de irregularidades, muchas de las cuales constaban en los mismos legajos y partes diarios del Hogar. Estas irregularidades fueron dadas a conocer ampliamente a través de informaciones públicas.
4. La exposición de los hechos a través de los medios de comunicación social llevaron el caso a un marco de gran confusión y manipulación, implicando a personas e instituciones que en su momento actuaron buscando el bien de los menores: Monseñor Benites Astoul, autoridades de la escuela, el párroco de la zona, y otros.
5. Para evitar mayores conflictos, especialmente teniendo en cuenta el cuidado de los niños y adolescentes allí alojados, la Jueza ha pedido al Arzobispado de Buenos Aires, a través de la Comisión de Pastoral Social, se haga cargo de la custodia de los menores que aún quedan en el Hogar, hasta que se cumpla a la brevedad lo dictaminado por ella.