La licencia médica resguardó a Cristina de la muerte de Nisman

A pesar de los últimos hechos que conmocionaron al país, la Presidenta Cristina Fernández continúa con su reposo en la quinta de Olivos por una fractura de tobillo. La última vez que se la vio fuera de la residencia fue el 30 de diciembre pasado, gracias al permiso de los médicos, para viajar a El Calafate para festejar año nuevo. En su momento, los médicos le dieron a la mandataria 45 días de reposo por lo cual la Presidenta tendría que estar resguardada hasta el 9 de febrero. 

Igualmente, Cristina continúa su actividad desde Olivos. El 5 de enero recibió allí al jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, y al secretario de Legal y Técnica, Calos Zannini. En ese momento, Capitanich declaró que la Presidenta "todo el tiempo está en cada uno de los problemas". El 16 de enero, se juntó en la Residencia Presidencial con el afamado economista Thomas Piketty.

Luego de que hallaran muerto al fiscal Nisman, la noche del domingo 18, la mandataria se limitó a comunicarse vía Facebook y Twitter. Al día siguiente del hallazgo, Cristina utilizó las redes sociales para publicar un comunicado en el que trataba al hecho de “¿suicidio?”, y, está mañana, publicó un nuevo texto en el que, según ella, la muerte del fiscal no fue un suicidio. “El suicidio (que estoy convencida) no fue suicidio”, escribió en el título la Presidenta.   

A fines del año pasado, el 26 de diciembre, la jefa de Estado tuvo una caída debido a un “líquido deslizante” -según el jefe de Gabinete- y se rompió el tobillo. Por este accidente tuvo que volar de urgencia de Rio Gallegos a Buenos Aires para recibir atención médica. Este hecho sacó a la luz el mal estado de los hospitales en la provincia que los Kirchner gobernaron de 1991 hasta 2003.