Hace algunas semanas, los partidos políticos más chicos apoyaron la reforma política K. Ayer, la presidenta Cristina Kirchner vetó parcialmente la ley presentada por ella y aprobada por el "viejo" Congreso y aplicó lo que venían anticipando varios dirigentes de la oposición: la "vetocracia".
La reforma política entró en vigencia al ser publicada en el Boletín Oficial, pero con observaciones a los dos artículos que postergaban hasta diciembre de 2011 algunas exigencias de la norma y así favorecían a los partidos no consolidados.
El Poder Ejecutivo expresó que los artículos 107 y 108 "contradicen el objetivo central de la ley al diferir hasta el año 2012 la aplicación de normas directamente relacionadas con la mejora de la representación política y fundamentales para ordenar el universo de actores políticos".
En el texto, según informó la agencia DYN, se indica que el artículo 108 de la ley establecía que recién en el 2012 comenzaría a regir el ítem que señalaba que, durante la vigencia del reconocimiento provisorio, los partidos políticos no podrían presentar candidaturas a cargos electivos ni en elecciones primarias ni en elecciones nacionales.
En tanto, el artículo 107 también fijaba el 31 de diciembre de 2011 como fecha para la puesta en vigencia del inciso tercero del artículo séptimo y del artículo octavo de la norma, referidos a los requisitos para la formación de confederaciones nacionales y para la fusión de partidos políticos.
Críticas. El diputado nacional de la Coalición Cívica Adrián Pérez afirmó que la decisión gubernamental "priva de representación política a millones de argentinos". "Es mentira que el veto parcial de la Presidenta no altere el espíritu ni la unidad del Proyecto sancionado por el Honorable Congreso de la Nación, como dice el decreto reglamentario", desafió.
Por el contrario, aseguró que "atenta contra las libertades políticas de los ciudadanos de la República de elegir libremente a sus representantes". Además, Pérez apuntó que las observaciones introducidas a los artículos 107 y 108 de la ley "harán que caduquen inmediatamente las personerías jurídicas de todos los partidos políticos que no cumplan con los requisitos establecidos por la norma, sin los plazos de adaptación que establecía la sanción del Congreso".
A su vez, el titular de la UCR, Ernesto Sanz, sin hacer referencia explícita al veto parcial de la ley de reforma política, embistió contra el uso de ese mecanismo. Dijo que si la opción se convierte en habitual "comienza a ser una herramienta antidemocrática".
Por su parte, la diputada Patricia Bullrich sostuvo que "el veto parcial de la Presidenta a la ley de Reforma Política, en los artículos 107 y 108, demuestra el engaño absoluto que el kirchnerismo realizó cuando propició dicha ley".
Por último, Pino Solanas, representante de Proyecto Sur, se mostró indignado. Es que la reforma lo obliga a buscar una rápida afiliación de sus votantes para no quedar fuera de las presidenciales: "Para nosotros, es una verdadera guachada", sintetizó.
