El fiscal federal de la causa Schoklender, Jorge Di Lello, aseguró ayer que no comparte la decisión de la Cámara Federal de llevar a foja cero la causa por el supuesto desvío de fondos de la Fundación Madres de Plaza de Mayo y aseguró que el mensaje que se transmitió a la sociedad es de “impunidad”.
Di Lello salió a criticar a las autoridades judiciales que decidieron apartar al juez Norberto Oyarbide de la causa –a pesar de sus diferencias– y anular todo lo actuado en el expediente.
La decisión fue tomada por dos miembros de la Sala I de la Cámara Federal. “Esa sala es la sala de Jaime y de Schoklender y otros, saquen ustedes sus conclusiones y lo que opina la gente”, aseguró el fiscal.
PERFIL reveló ayer que en un mismo día los camaristas volvieron a complacer al Gobierno en plena campaña electoral con tres fallos, y que uno de los miembros de la Sala admitió a un allegado que se había tomado licencia para evitar firmar esos fallos.
El camarista Eduardo “Chiche” Freiler le manifestó el viernes por la mañana a uno de sus más allegados en el Poder Judicial: “Las cosas tienen un límite”, y le aseguró a su confidente que había pedido licencia en su cargo para no tener que firmar las resoluciones, revelaron fuentes judiciales. Esta vez, más que nunca, la Sala se ganó su apodo en los tribunales federales, donde sus miembros la bautizaron como “la sala K”.
El fiscal dijo estar “dolido y molesto” por las críticas que le lanzó la Cámara Federal por su actuación en el caso Ciccone, el mismo día que el tribunal decidió lo de Schoklender.
Además dijo que “el mensaje que se transmite (anulando la causa Schoklender) es la impunidad, fracasa el derecho penal”, alertó en declaraciones a radio América.
Esta sala de la Cámara, integrada por Jorge “Pati” Ballesteros, Eduardo Farah y Freiler, es la misma que eximió de prisión a Ricardo Jaime. Esa decisión sí la firmó Freiler con Ballesteros. El jueves, la Sala I no sólo anuló la causa contra Schoklender, también en la causa Ciccone retó a Di Lello y al juez Ariel Lijo, criticó las pruebas y ordenó acelerar los tiempos para que Amado Boudou se saque de encima el problema. Además, ese mismo día sobreseyeron a Daniel Cameron, secretario de Energía, en otra causa.
Eduardo Fachal, abogado de Madres, rechazó la decisión de los camaristas, al advertir que es “extraño” que sin detenidos se hayan tomado “tan poco tiempo para resolver”.