El titular de la Secretaría de Inteligencia del Estado, Héctor Icazuriaga, rechazó hoy la participación de la SIDE en "cualquier tipo de interceptación telefónica que no fuera solicitada por una autoridad judicial competente".
La inédita respuesta pública de Icazuriaga buscó así desmentir que la separación del jefe de Inteligencia del Ejército, general Osvaldo Montero, hubiera sido motivada por supuestas escuchas de la SIDE donde la ministra Nilda Garré habría comprobado que conspiraba en su contra.
La pregunta que queda en el aire es cómo llegó el material grabado en CD con las conversaciones entre Montero y la directora de Inteligencia Criminal de Interior, Verónica Fernández Sagari, a las manos de la jefa del Ministerio de Defensa, si Icazuriaga asegura que su agencia no pinchó teléfonos. Por las dudas, el jefe de Sagari, Aníbal Fernanénz, ayer negó todo .
Garré denunció que hubo un cruce de llamadas entre esos funcionaros donde se orquestaba una operación para perjudicar su carrera al frente de Defensa, en los días previos a la ratificación en su cargo.
La SIDE recordó que sus funciones responden a los mandatos de la ley 25.520, que "impide de forma expresa, entre otras, cualquier tipo de interceptación telefónica que no fuera solicitada por una autoridad judicial competente".
"Es por ello que niego taxativamente las imputaciones que se realizan a la institución a mi cargo en el contexto de los hechos públicamente conocidos", agregó Icazuriaga en el comunicado.
Desde la oposición no tardó en llegar un pedido de explicación. Ayer, el senador de la UCR, Gerardo Morales, había pedido explicaciones a Garré acerca de "por qué" y "de quién" tiene "escuchas telefónicas" fuera "de cualquier causa judicial". Todavía no las dio.
"Aunque sea redundante ratifico plenamente que la secretaría que conduzco esta sometida e identificada con los principios que emanan de la Constitución nacional, las leyes vigentes y el sistema democrático", enfatizó hoy Icazuriaga.
Fuente: DyN