El gobierno nacional emitirá deuda por casi 1.265 millones de dólares, para cancelar los pagos de la importación de combustibles líquidos, principalmente fueloil, provenientes de Venezuela que vencen este año y el próximo. La medida fue dispuesta mediante una resolución conjunta de las Secretarías de Hacienda y de Finanzas firmada el último día hábil de 2010 y publicada ayer en el Boletín Oficial.
Se trata de dieciocho documentos que el Tesoro Nacional le entrega a CAMMESA, la compañía que regula el mercado mayorista eléctrico, y ENARSA, la casi inexistente empresa petrolera creada por el gobierno de Néstor Kirchner para manejar negocios energéticos. Los documentos tienen vencimientos a lo largo de 2011 y 2012 y tienen una tasa de interés Libo a tres meses más 6 puntos porcentuales.
Los considerandos de la medida indican que la deuda tiene que ver con las operaciones de importación de combustible desde Venezuela que se hicieron el año pasado con el fin de alimentar las generadoras eléctricas, en el marco de la falta de gas en invierno.
Unas 300 grandes compañías estuvieron afectadas en agosto por restricciones de gas dispuestas por el Gobierno para evitar que se corte el suministro a los hogares. En el pico del frío invernal el Polo Petroquímico de Bahía Blanca, quedó casi paralizado como así también en Córdoba, donde los cortes a empresas fueron totales.
Según el ex secretario de Energía, Daniel Montamat, el Gobierno resaltó que las reservas de gas se redujeron a la mitad en la última década, de 800.000 millones de metros cúbicos a los 400.000 millones actuales y que hará falta mucho tiempo para recomponerlas.
La importación de combustibles también sirvió para abastecer la fuerte demanda de gas-oil destinado al transporte de cargas y de pasajeros que cuenta con un subsidio por parte del Estado.
Fuente: DYN