El líder del PRO, Mauricio Macri, se despachó con un fuerte discurso contra el kirchnerismo para festejar la contundente victoria de su delfín en la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, que se impuso por alrededor 20 puntos pero deberá enfrentar a Martín Lousteau en segunda vuelta.
“El gobierno quiere hacernos pensar que hay que elegir entre dos modelos económicos, pero no es así, es un cambio mucho más profundo”, comenzó, en el colorido escenario del búnker del PRO, minutos después de las 21.
El ingeniero sostuvo que propone un cambio “que tiene que ver con nuestra forma de relacionarnos, nuestra forma de convivir”. Y completó: “Es una política que entienda que ganar una elección no te hace dueño del Estado; que gobernar es escuchar; que gobernar es cuidar; que gobernar es estar cerca. Es llevar adelante iniciativas completas que resuelvan los problemas de la gente para que puedan vivir mejor”.
En esa línea, el líder del PRO afirmó que “el Gobierno está preocupado, apurado por instalar que ya ganaron, no quieren perder sus privilegios”. Allí, enumeró una catarata de críticas al kirchnerismo: “También quieren sembrar, desde la mentira y un relato falso, el miedo de que queremos volver al pasado. Ellos son el pasado. Ellos han gobernado los últimos 25 años. Ellos han prometido mucho y cumplido muy poco”.
“Nosotros queremos ir al futuro, con un gobierno que entienda que hay que aceptar la convivencia. Que hay que aceptar la división de poderes. Que tiene que haber una justicia independiente, medios de comunicación que se expresen libremente”, continuó.
Por último, afirmó que “lo más importante es la Argentina que soñamos”. “La vamos a lograr si tenemos un gobierno que entiende que eso va a suceder si cada uno de nosotros desarrolla al máximo sus potencialidades. Ahí está la verdad, en que cada uno alcance su plenitud, no en un liderazgo mesiánico”.