El Presidente Mauricio Macri recibió en la residencia de Olivos al suspendido titular de la Aduana, Juan José Gómez Centurión, y le aseguró que si la Justicia dictamina la falta de mérito, el funcionario retomará inmediatamente sus funciones.
Gómez Centurión llegó a Olivos por la mañana, según confirmaron a Télam, tras haber ampliado sus argumentos y ratificar que no cometió ningún hecho ilícito, irregularidad o delito desde su función como responsable máximo de las Aduanas del país.
Según las fuentes consultadas, el Presidente escuchó al funcionario separado del cargo y le dijo que, en caso de que la Justicia dictamine su falta de mérito, podrá retomar funciones.
Además del encuentro con Macri, Gómez Centurión cuenta con el apoyo público de la diputada de Cambiemos, Elisa Carrió, quien reveló que mañana se presentará para darle su respaldo ante el juez Ariel Lijo, a cargo de la investigación de la denuncia que lo sacó al jefe de la Aduana de su cargo.
"Presentaré ante la Justicia a los responsables de la operación de inteligencia de las mafias que quieren que el mayor sistema de robo a la Argentina siga funcionando. Alberto Abad es el mejor jefe de la AFIP y tengo toda mi confianza en él y también estoy segura de que todos combatimos las mismas mafias, tanto Abad, como Gómez Centurión y yo", aseguró Carrió.
Finalmente, en un mensaje publicado en su perfil en Facebook, resaltó la diputada que "la denuncia conjunta de Abad y Gómez Centurión sobre la defraudación en la Argentina por 12 mil millones de dólares de importaciones no realizadas no solo preocupa a las mafias, sino también al establishment".
Gómez Centurión, un ex militar que combatió en la guerra de Malvinas y se incorporó al macrismo hace una década, fue desplazado de la Aduana después que el ministerio de Seguridad recibiera un sobre anónimo con una denuncia por actos de corrupción, en la que se lo alude y a otra persona cercana a él y que el Gobierno envió a la Justicia para su investigación.
El ex militar sostuvo en su defensa que las acusaciones en su contra serían una "devolución de gentilezas" por una denuncia sobre supuestas inconsistencias en las declaraciones juradas anticipadas de importación.