En una conferencia de prensa desde la jefatura de Gobierno porteña, el mandatario comunal Mauricio Macri criticó hoy sin medias tintas a la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner por el paro del subterráneo que ya lleva siete días y que se extenderá durante el sábado.
Macri buscó deslindarse de responsabilidades en la interrupción del servicio de subtes que ha afectado a un millón de pasajeros durante toda la semana: "Los metrodelegados han sido una creación del kirchnerismo y responden a una consigna kirchnerista".
"Es un conflicto 100 por ciento político. Tiene muy poco que ver con el subte", dijo Macri, y luego amplió que no se trata de "una cuestión de recursos", sino que tiene detrás una "vocación de someter". También enfatizó que "Pianelli estaba anoche en la Casa Rosada".
"Cuando la Presidenta dijo 'vamos por todo', me quedó claro que quiere llevar a la Argentina a un modelo chavista, de pensamiento único", expresó rotundo el jefe de Gobierno porteño, e hizo referencia al conflicto entre la Nación y la provincia de Córdoba, y al caso del agente inmobiliario Toselli. "No se puede pensar distinto a lo que piensa la Presidenta", dijo.
"Yo no soy neutral, yo estoy con cada periodista independiente que sea amedrentado por el gobierno", aseguró. "No tengo miedo, me han perseguido y me perseguirán", dijo.
