Sumar vínculos con Brasil, Estados Unidos y Europa; denunciar a Irán y a Venezuela. Por si llega a la Casa Rosada, Mauricio Macri ya prepara una frondosa agenda internacional que tiene como tema excluyente rearmar el esquema de relaciones de Argentina con el mundo.
El plan tiene a Brasil como principal destinatario de los mensajes que intentará dar Macri. El país vecino es considerado “socio estratégico”, como base para reforzar el Mercosur y, desde allí, mejorar la relación con la Unión Europea y con EE.UU. “La prioridad es la relación con Brasil, por eso el primer viaje será a Brasilia (durante los primeros días de mandato, en diciembre). A partir de allí le daremos la prioridad a la región”, explica a PERFIL Fulvio Pompeo, subsecretario de Relaciones Internacionales porteño y quien le organiza todos los viajes al exterior al candidato de Cambiemos desde hace ocho años.
En el macrismo creen que la relación con el país vecino está dañada, entre otras motivos, por el cepo cambiario. Si bien nunca se reunió con Dilma, ni con Lula da Silva, Macri construyó un buen vínculo con el canciller Mauro Vieira, a quien vio en febrero pasado cuando visitó Buenos Aires.
Otra parte del programa, del que participaron además de Pompeo, Marcelo Elizondo (especialista en comercio exterior) y el ex embajador Diego Guelar, supone una fuerte condena a Venezuela por los detenidos políticos e incluso que Macri proponga una sanción del Mercosur. Por ahora, están descartados acuerdos bilaterales o de libre de comercio por fuera del bloque sudamericano.
Por otro lado, el plan también supone mejorar el vínculo con Europa, en particular con Italia, España y Francia. Incluso, con Alemania (Macri se reunió con Angela Merkel el año pasado). “En el marco de la estrategia internacional queremos lograr un equilibrio entre los bloques de países, entre ellos la relación China-Rusia y EE.UU.-Europa”, completa Pompeo. Macri se reunió tres veces con Hillary Clinton, y en el último encuentro la candidata estadounidense le pidió que se sumara al freno a Irán en su carrera armamentista. De todos modos, Macri planeaba denunciar el memorándum por la AMIA.
Además de Brasilia, en su primer año de gestión Macri podría viajar a dos destinos clave para encarar reuniones bilaterales: el G20 y, a diferencia de Cristina Kirchner, el Foro de Davos. Paralelamente, sus asesores piensan avanzar con una agenda que combine la figura del papa Francisco asociada a la Argentina.
