POLITICA
tras la polemica por los dichos presidenciales

Malcorra se diferencia de Macri: “Yo no uso el concepto de ‘guerra sucia’”

Advirtió además que judicializar la suba de tarifas le hace mal a la imagen del país, y aseguró que la Argentina busca evitar confrontar con Venezuela por el Mercosur.

malcorra guerra
Soberanía. La canciller afirmó que la relación con el Reino Unido va más allá de Malvinas, pero aclaró que en ese punto tienen una diferencia profunda. | Mariano Solier

En una entrevista con PERFIL, la canciller Susana Malcorra se refirió a la relación con Venezuela y el Reino Unido, a las tarifas, a los desaparecidos y a su candidatura para la ONU.

—El Presidente usó el concepto de “guerra sucia”, que hacía mucho no se escuchaba, ¿no embarra la política de derechos humanos de la Argentina?

—Yo personalmente no uso el concepto de guerra sucia. Creo que hubo un enfrentamiento asimétrico, que obviamente le da una responsabilidad al Estado distinta a la de otros jugadores. También creo que otros jugadores intervinieron de una manera que no se correspondía con la convivencia. Yo no hubiera usado el término “guerra sucia”, pero tampoco se en qué contexto lo usó.

—Hay una fuerte polémica respecto del número de la cantidad de desaparecidos.

—Yo he usado, estando en el exterior, en Naciones Unidas, el número de 30 mil como referencia. La realidad es que no podemos entrar en un tema matemático en esto. ¿Cuál es el tema? Es una enormidad.  Que sean 9 mil o 30 mil no quita la enormidad del problema. Fue un horror lo que pasó.

—Han pasado ocho meses de Gobierno, el problema sigue siendo la falta de confianza de inversores en la Argentina, ¿cómo se puede modificar esto?

—Uno no revierte tendencias de un día para el otro. Yo he dicho que la confianza se pierde muy rápido y se gana con tiempo, con consistencia de medidas, decisiones y acciones. El primer paso para recuperar totalmente la confianza es salir y presentar al país con la visión y la perspectiva que el presidente Macri le ha impreso a esta gestión. Eso lo hemos estado haciendo de manera incansable. Después vienen las pruebas de amor, y tienen que ver con cuánto los argentinos mismos estamos dispuestos a invertir en la Argentina, y eso es algo que el mundo lee. Ahí están empezando a moverse las cosas.

—¿Corresponde que hable con Macri sobre el daño que le hacen a la Argentina aspectos como el tarifazo en términos de política exterior?

—Lo que le ha hecho daño a la Argentina es tener tarifas congeladas por tanto tiempo. Cuando uno tiene retrasos que llevan diez, ocho años, con una inflación sostenida del 30% , reordenar ese atraso no es una cosa sencilla. Esto ha generado una discusión enorme, una judicialización del tema de las tarifas que no es buena para el reordenamiento ni es buena para la imagen.

—¿Tienen alguna estrategia para la autoproclamación de Venezuela en el Mercosur?

—Estamos trabajando en este tema. La posición de la Argentina es que no hay automaticidad de traspaso, no la hubo nunca. Vamos a tratar de evitar una confrontación que creemos que no le sirve al Mercosur.

—¿No hubiese sido lo correcto aplicarle la cláusula democrática?

—Es que no hay acuerdo en aplicar la cláusula democrática.

—En el escenario de Venezuela, el diagnóstico de distintos países es el de una crisis social muy profunda, ¿cuál es el papel del Vaticano?

—Tuve ocasión de hablar con Su Santidad, y volvió a reiterar que el Vaticano estaría dispuesto a ayudar pero que tendrían que estar dadas las condiciones. Me da la impresión de que estamos muy cerca de que el Vaticano esté dispuesto a participar: la situación se ha agravado. Se ha avanzado en la idea del revocatorio, pero la pregunta es cuándo se puede hacer. Me parece que el Vaticano puede ayudar, no sólo en lo inmediato, el desabastecimiento, sino en el diálogo.

—¿Dónde estamos parados en la relación con el Reino Unido?

—Tenemos una relación con el Reino Unido que va más allá de Malvinas. Dicho esto, Malvinas es una diferencia profunda que se resuelve con diálogo.


“En la ONU, la votación es táctica”

—¿Cómo va la candidatura a secretaria general de la ONU?

—Por ahora los votos son todos del mismo color, no hay aplicación del voto diferenciado de los P5 (N de la R: los países miembros con derecho a veto). Cuando exista, cambia la dinámica de la votación. Es una votación táctica, todo el mundo trata de privilegiar al candidato que prefiere. Lamentablemente, en términos generales el voto a las mujeres está mucho peor que el voto a los hombres. Eso me apena mucho, hay mujeres muy distinguidas y con mucha experiencia.

—¿Por qué?

—Yo creo profundamente que todavía hay un voto sesgado en contra de las mujeres. A igualdad de capacidades siempre hay un pequeño margen negativo con las mujeres.

—¿Su candidatura condiciona su trabajo, como dicen algunos sectores de la oposición?

—Estoy trabajando como canciller full time. Trabajo con total consistencia y coherencia.