“Voy a seguir peleando”. Pese a quedar en tercer lugar, Sergio Massa festejó ayer haberse posicionado como uno de los líderes de la oposición, con el capital nada despreciable del 21% de los votos. Tras felicitar a Daniel Scioli y Mauricio Macri, adelantó cuál será su estrategia de cara al ballottage: “En las próximas horas nos vamos a juntar para armar un documento único para que en la Argentina no se discutan cargos, sino programas de gobierno. Que haya un cambio positivo e inteligente”.
Así, el diputado nacional adelantó que apostará a acordar ejes programáticos para que un eventual gobierno de Scioli o Macri aplique algunas de sus propuestas de campaña.
Algunas de ellas, como pagar el 82% móvil a los jubilados o eliminar el impuesto a las ganancias, fueron ayer parte central de su discurso. “Rompimos la idea de que las campañas son sólo slogans”, disparó contra sus contrincantes.
En el massismo anticipaban que su candidato buscará “acuerdos en políticas públicas” pero dificilmente exprese un apoyo explícito a Daniel Scioli o Mauricio Macri.
En el Frente Renovador reconocían ayer que Massa aún está muy dolido con el líder del PRO, quien se negó a acordar una alianza opositora más amplia. “No sabemos qué vamos a hacer. Somos una fuerza independiente”, marcó la cancha Alberto Fernández, desde el centro de campaña de Una Nueva Alternativa (UNA).
Si Scioli triunfa, Massa intentará erigirse en el líder de la oposición. “¿No fue esta elección? Será la próxima si Dios quiere. Llegamos al objetivo que queríamos: le dimos un salto de calidad a la Democracia argentina, dando el debate y explicando nuestras propuestas”, afirmaron desde UNA. Si Macri se consagra como sucesor de Cristina Fernández de Kirchner, el lugar de oposición lo ocupará naturalmente el peronismo. Allí, Massa intentará correr al kirchnerismo y reconquistar con José Manuel de la Sota al PJ. Planes.
Pumas en familia. La jornada comenzó temprano para diputado nacional y ex jefe de gabinete. Votó a las 9.30 horas en la escuela Martín Fierro, de Tigre. “Más allá del resultado, más allá de las cuestiones políticas, ojalá que empiece una etapa nueva en la Argentina”, declaró a la prensa, minutos antes de oír el reclamo de una vecina por la “falta de obras” en el municipio. En las elecciones comunales, el intendente Julio Zamora, del riñón de Massa, se impuso sobre el empresario de medios kirchnerista, Sergio Szpolski.
A media mañana, Massa acompañó a votar a su esposa, Malena Galmarini. Luego, almorzó lasagna en su casa, rodeado de su familia y sus padres, Lucy y Fofo. Vio la derrota de los Pumas frente a Australia junto a Juan de la Cruz “Manasa” Fernández Miranda, ex rugbier y secretario de Deportes de Tigre.
Por la tarde, se reunió con su equipo de campaña en el piso 17 de la Torre de las Naciones, el búnker donde diseñó su estrategia electoral.
Rodeado por Malena, Graciela Camaño, colaboradores del ex ministro de Economía, Roberto Lavagna, y su equipo de comunicación, Massa bajó línea sobre cuál será el discurso en los próximos días: destacar que construyeron una fuerza nacional que aspira en el futuro a ser una alternativa de poder en la Argentina