Mayra Mendoza, "la capitana" de La Cámpora y diputada nacional, fue una de las organizadoras más importantes del acto de Cristina Fernández en Vélez. No era tarea fácil: en el estadio hubo al menos 60.000 personas y afuera otros miles que siguieron el discurso por pantallas de TV.
Mayra llevó una radio en la cintura y monitoreó los ingresos de los distintas columnas al estadio de Vélez. Ella quedo a cargo del "campo VIP", reservado para empleados de ministerios y otras dependencias del Estado, a metros del palco central. Ella fue la "acomodadora" de ese sector, mientras daba órdenes a otros militantes que custodiaban puertas y accesos.
Con jean y remera oscura de La Cámpora, Mayra tuvo desde temprano un dia más que agitado. A las diez de la mañana comenzaron a llegaron los organizadores de La Cámpora al estadio, para que todo estuviera en orden a las 17, el horario que al final comenzó el discurso de "la jefa".
Perfil.com se la cruzó en ese sector al ex empleada de Anses y miembro de la "mesa chica" camporista y le pidió unas palabras después del acto. "No", señaló la diputada con el dedo.
Al terminar el acto, tras horas de desgaste, la "capitana" de La Cámpora tuvo su desquite, juntó a sus hombres a cargo del sector VIP, cantaron y bailaron. Fue pura celebración, como si el kirchnerismo hubiese ganado otra elección.
(*) De la redacción de Perfil.com