Los cuestionamientos recibidos de parte del "bederismo" son "un acto de gran deshonestidad", puntualizó Maza este mediodía en una conferencia de prensa que brindó en la Casa de Gobierno.
Así, el mandatario provincial y aliado del presidente Néstor Kirchner, buscó contrarrestar las acusaciones de la oposición, que le endilga tener intereses comerciales en la futura explotación minera y haber ocultado "irregularidades" en la contratación con la empresa Barrick Gold.
En tanto, en la sede del Legislativo se demoraba el inicio de la sesión donde se pediría la suspensión del gobernador por la causa "Tierras del Golf".
De modo paralelo, sobrevolaba en la provincia la contingencia de que el poder central decida la "intervención" de los tres poderes del distrito.
En diálogo con radio Fénix, el diputado nacional José María Díaz Bancalari negó que el Presidente tenga decidido disponer el remedio federal. "El Presidente no quiere intervenir la provincia, salvo que sea imprescindible", aseguró el dirigente kirchnerista, quien agregó que "los problemas deben solucionarse dentro de la misma jurisdicción. Si no se encuentra la solución dentro de la provincia, tendrá que tomar medidas el Presidente", advirtió.