Horas antes del cierre de alianzas de los espacios para las próximas elecciones presidenciales, Miguel Ángel Pichetto confesó que le "perturba la idea de que Argentina vuelva al pasado" en relación a la posibilidad de un triunfo de la fórmula de Alberto Fernández y Cristina Kirchner. El senador nacional analizó que en octubre se elige "entre un modelo capitalista y uno de intervención del pasado".
"El proceso del presidente (Mauricio) Macri culmina en el 2023, en términos históricos y políticos", expresó Pichetto en el programa Odisea Argentina en LN+. El dirigente de Alternativa Federal pronosticó que a partir de ese año el debate político será de la generación de los 40 a los 50 años, de la que forman parte los referentes de Cambiemos como Horacio Rodríguez Larreta, María Eugenia Vidal y los peronistas como Sergio Uñac y Sergio Massa.
El legislador por Río Negro enfatizó la idea de que el país discute en las próximas elecciones "entre un modelo capitalista y uno de intervención del pasado, de intervención socialista con una economía cerrada, cepo y control de importaciones". Además defendió al Gobierno al considerarlo que es más federalista que el de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner porque "tuvo que negociar y acordar en el Senado y tuvo que cederle a las provincias reclamos que la Justicia aún no les había concedido".
Cómo quedó el mapa político tras el test electoral del domingo
La semana pasada, el dirigente peronista generó revuelo al confesar que si llegara a darse un ballotaje entre Macri y Fernández no dudará en votar al actual presidente "a pesar de los errores", frente a una otra opción que considera "antidemocrática". Entrevistado en el programa Corea del Centro, Pichetto aseguró que la opción de Unidad Ciudadana quiere "volver al pasado, con ideas que son viejas" y "que habla de una Latinoamérica que ya no existe y no comprende el mundo en el que se vive".
En ese sentido, Pichetto explicó que en realidad "no votaría por el kirchnerismo" y que "la grieta en la Argentina tiene que ver con una visión democrática o con concesiones autoritarias que anidan en el seno del kircnerismo no resueltas". "Creo que hay que mantener un rumbo capitalista e inteligente. Creo en la apertura, no tonta. Defendiendo los intereses nacionales pero integrado al mundo", agregó.
DR/FF