El ministro de Seguridad porteño, Guillermo Montenegro, aseveró hoy que está "podrido de escuchar" al secretario de Seguridad, Sergio Berni, "hablar de la seguridad de la Ciudad" y le pidió que "también se ocupe del resto del país".
En medio de acusaciones cruzadas entre funcionarios nacionales y porteños por el desalojo en un predio usurpado en Villa Lugano, Montenegro afirmó que Berni "tiene que dejar de hablar todo el tiempo del narcotráfico en la Villa 20 porque los grandes carteles de drogas están en otros lados".
"Hay narcotraficantes en la villa 20 porque hay narcotraficantes en toda la Argentina y el secretario de Seguridad de toda la Argentina es él", apuntó el funcionario porteño en diálogo con DyN.
Tras el tiroteo registrado esta madrugada en el predio desalojado hace una semana, Montenegro remarcó que "este tipo de cosas pasan todo los días en Lugano, pero nunca con esta virulencia".
El ministro también sostuvo que tienen que reforzar la seguridad en el predio porque trabajan "sobre la hipótesis de que esto va a volver ocurrir" ya que "mientras no se identifique a los agresores, esto no se puede frenar".
"Esto está organizado. Son mafias que tienen claro qué están haciendo. Estas no son personas necesitadas", afirmó Montenegro, quien además señaló que el ataque contra agentes de la Policía Metropolitana fue "de golpe, sin ningún tipo de motivación", aunque remarcó que estaban "alertados de que podía pasar".
En cuanto las declaraciones de Berni, quien aseguró que el tiroteo es parte de "las consecuencias predecibles e inevitables de un desalojo terriblemente mal hecho por parte del gobierno de la Ciudad", Montenegro indicó que está "podrido de escuchar a Berni hablar de la seguridad de la Ciudad".
"Que también se preocupe por el resto de país", remarcó. Que "tenga cuidado cuando dice que la villa 20 está llena de narcotraficantes porque también hay gente honesta y necesitada".
Además, Montenegro precisó que esta madrugada fue desalojado el sector de "Los paraguayos", que no había sido despejado el sábado, lo que despertó el cuestionamiento de funcionarios nacionales que aseguraban que allí estaban los delincuentes y narcotraficantes más peligrosos.