POLITICA
Elecciones legislativas

Omar Plaini, de canillita a candidato en las listas K

Es uno de los hombres de la CGT elegido por Moyano para sumar a la boleta del PJ en los próximos comicios. Habla del poder de Clarín y la "falta de ideas" de la oposición.

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El sindicato de Vendedores de Diarios y Revistas (SIVENDIA) tendrá quien lo represente en l as próximas elecciones legislativas. Omar Plaini, su titular, ya luce como candidato en la boleta K por la provincia de Buenos Aires, junto al ex presidente Néstor Kirchner: "Hay candidatos porque hay trabajo", se defiende.

Plaini como su compañero Héctor Recalde es uno de los dirigentes fuertes que Hugo Moyano eligió para sumar durante el cierre de listas y uno de los que dijo presente durante el multitudinario acto por el "Día del Trabajador" que significó una demostración pública de las fuerzas de la confederación.

Unos siete mil canillitas integran el gremio en Capital y el Gran Buenos Aires y en todo país llegan veinte mil: "El 28 de junio se define un modelo de país. Acá no se discuten candidaturas si no un modelo. Y el gobierno expresa un modelo. Del lado de la oposición no veo  propuestas y me preocupa", provoca Plaini, que maneja los hilos SIVENDIA desde fines de 2006.

Al arribar al gremio, decretó que el 7 de noviembre, Día del Canillita vuelva a ser feriado y día de descanso para kiosqueros, algo que generó serios dolores de cabeza a las diarios más fuertes del país: "Hasta 1997 los diarios no se editaban. Pero 1500 canillitas decidimos en asamblea volver a descansar en nuestro día".

Según Plaini, el día de descanso dejó de respetarse "porque hubo una imposición unilateral de quienes tienen una posición dominante en la industria gráfica como Clarín y La Nación", sostiene. "El día de descanso es nuestro día. Las políticas neoliberales de los noventa hicieron que, entre otras cosas, nos quitaran los días de descanso, la ley que regulaba la actividad y que nos bajaran el porcentaje de la ganancia sobre el precio de tapa de los diarios", agrega.

Al mismo tiempo, se defiende de quienes hablaron de "presión" durante el acto del 1 de mayo: "Esas son lecturas malintencionadas. El movimiento obrero no tiene necesidad de hacer eso para participar. No debemos demostrar nada".