El recorte en las retenciones al trigo y el maíz y las demás medidas anunciadas hoy cayeron pésimo en los dirigentes del campo que en cuestión de horas criticaron el paquete anunciado por la presidenta, en un contexto en el que sigue latente la idea de volver a las rutas ante la falta de respuestas a los pedidos de diálogo solicitados por la Mesa de Enlace.
El presidente de la Federación Agraria Argentina (FAA), Eduardo Buzzi, fue el más extremo a la hora de cuestionar las medidas anunciadas, al sostener que son "post mortem", ya que su aplicación se producirá cuando muchos productores estén fuera de la actividad.
En conferencia de prensa, el santafesino advirtió que las creación de cinco corrales de engorde (feed lots) lo único que hará será favorecer la concentración: "se busca favorecer a cinco amigos", sentenció, poniendo en duda las verdaderas intenciones del anuncio K.
"Los efectos sobre la agroindustria van a ser muy graves", vaticinó, al tiempo que remarcó la importancia de recomponer el diálogo con el Gobierno, afectado desde la promulgación de la resolución 125 y prácticamente inexistente en los últimos meses.
Por su parte, Hugo Biolcati, presidente de la Sociedad Rural, quien ya había cuestionado los anuncios aún inclusive cuando eran sólo trascendidos, expresó que los anuncios sólo demuestra que "falta voluntad política" para encauzar la "severa crisis de rentabilidad" que soportan las actividades agropecuarias en su conjunto.
"No hay ninguna voluntad de solucionar la crisis severa del campo", afirmó Biolcati y ratificó que "no existe ningún contacto" con las autoridades nacionales para "dialogar y consensuar políticas sectoriales". Asimismo, apuntó a Cheppi: "Nos pidió paciencia y dijo que estaba trabajando, pero nunca más nos convocó".
Fuente: DyN