Pese a las críticas de legisladores opositores, un sector de vecinos de la zona y feriantes, el Gobierno porteño insistió hoy en defender el segundo vallado del Parque Centenario del barrio de Caballito, al asegurar que "lo piden los vecinos" y que, quienes se oponen, son "vendedores que no tienen permiso" y personas que "acampan" en ese predio.
Así lo indicó el jefe de Gabinete comunal, Horacio Rodríguez Larreta, quien afirmó que "todos los vecinos de la zona, con los que me reuní muchas veces, no sólo están de acuerdo" con que el paseo esté protegido con rejas, "sino que lo piden. Piden que no aflojemos y sigamos adelante con la obra".
Mientras tanto, un grupo de puesteros marcharon este mediodía hacia el Ministerio de Espacio Público de la Ciudad, en el centro porteño, para reclamar que no sea instaladas las rejas.
"Lo que está pasando es que queremos recuperar el parque para que lo disfruten todos los vecinos. Para eso hay una obra muy grande de recuperación, de mejora del espacio verde, pedida por todos los vecinos de Caballito y Parque Centenario. Eso incluye enrejar el parque", dijo el funcionario macrista a Radio 10.
Consultado sobre quiénes se oponen a esta medida, contestó: "Hay gente que no tiene nada que ver con el tema, que viene haciendo lío, ayer y antes de ayer, con mucha violencia. Hay un grupo de San Telmo, que no tiene nada que ver con el barrio ni con el parque, y vendedores que no tienen permiso".
Rodríguez Larreta apuntó que "hay un pequeño grupo" de personas que se habrían instalado a vivir en el parque: "Algunos se quedaban a dormir, acampaban, tenían un colectivo abandonado, una porquería que era una especie de aguantadero donde dejaban mercadería".
Rodríguez Larreta precisó que los vendedores de libros y artesanías, que trabajan en las ferias que allí se instalan los fines de semana, "tienen sus puestos y su permiso. No solamente se le va a mantener su lugar de trabajo sino que, al mejorarse el parque, van a tener más laburo".
Anoche, varias personas fueron detenidas en una nueva jornada de protesta protagonizada en contra del vallado que el gobierno capitalino pretende colocar en el predio del Parque Centenario. Al igual que el lunes a la noche, un grupo de manifestantes se enfrentó a la Guardia de Infantería de la Policía Metropolitana, que reprimió la protesta con balas de goma y gas pimienta.
"No" a más rejas. No obstante, el legislador Jorge Selser (Proyecto Sur) cuestionó la decisión del gobierno porteño de colocar un segundo enrejado en el Parque Centenario y repudió "los métodos brutales" contra quienes se oponen. "Ya sabemos cuál es la costumbre del gobierno porteño cuando sectores de la ciudad se expresan en contra de sus decisiones. No sólo no respeta la opinión de la oposición vetando las leyes, sino que además reprime", siguió el legislador.
"Hay una actitud permanente del gobierno de la Ciudad de alejar a la gente de los espacios públicos" y señaló que la administración macrista "evita su responsabilidad de cuidar y controlar las plazas mediante rejas. A esta costumbre de cercar toda las plazas públicas se suma "la de restringir el horario en el cual la gente puede realizar sus actividades principalmente en esta época de verano", señaló a la agencia Télam.
En tanto, el legislador porteño Aníbal Ibarra (Frente Progresista Popular) aseguró que, "en lugar de utilizar el diálogo", el jefe de Gobierno "va directamente a la represión y no le importa a quienes tenga en frente. Es un concepto autoritario de la organización social; en definitiva, es un concepto ideológico", señaló Ibarra a Télam.
