La secretaria de Medio Ambiente, Romina Picolotti, defendió hoy la legitimidad del reclamo del pueblo de Gualeguaychú que rechaza la papelera de Fray Bentos, y reiteró la situación de "ilegalidad" que tuvo la instalación de la planta de Botnia, en violación al Estatuto del Río Uruguay.
"El reclamo de la gente de Gualeguaychú es un reclamo legítimo. Aquí lo importante es no focalizar sobre el reclamo específico de la gente sino en el motivo, que Botnia en un recurso compartido", dijo Picolotti en declaraciones a Radio Continental.
La secretaria recordó que esta "ilegalidad" es lo que "desde hace dos años reclama el gobierno argentino al Estado uruguayo" y explicó que Uruguay no cumplió con lo que establece el Estatuto del Río Uruguay al autorizar en forma unilateral la instalación de una industria considerada contaminante sobre un recurso compartido.
La funcionaria, que antes de formar parte del gobierno nacional, perteneció a la Asamblea de Gualeguaychú como asesora, y que ahora afronta una investigación judicial por irregularidades en su secretaría, que casi le cuesta el cargo ,destacó la actitud del gobierno de Entre Ríos, al mando de Jorge Busti, y del gobierno nacional de "atender el reclamo de Gualeguaychú", algo que -dijo- no hicieron anteriores administraciones.
"El Gobierno ha hecho todo lo que está a su alcance para revertir la situación con el Estado uruguayo", sostuvo, aunque desestimó el pedido de Gualeguaychú de que se impida la exportación de madera a Uruguay.
Picolotti dijo que esa medida "no va a impedir lo que reclama Argentina, que es que Botnia respete el Estatuto del Río Uruguay" y recordó también que Botnia tiene sus propias plantaciones en Uruguay, por lo que no está atada a comprar madera de otros países.
La mujer del riñón del jefe de Gabinete, Alberto Fernández, insistió en que la única salida a este conflicto es que "el Estado argentino y el uruguayo se sienten en una mesa de negociaciones, en la que también debería estar la Asamblea de Gualeguaychú, y busquen una salida consensuada que implique el traslado de Botnia".
Sin embargo, planteó que del lado uruguayo "siempre hubo una actitud totalmente cerrada" de afirmar que era "su decisión", "su lado del río" y que por ese motivo hacían "lo que querían".
Pasado más de una mes de la nota que publicó el diario Clarín que denunciaba que Picolotti habría contratado a familiares y amigos para trabajar en la Secretaría, la funcionaria replicó el fin de semana que es víctima de una "persecución periodística" y que " hace meses que tanto mi familia como yo estamos padeciendo amenazas".
Fuente: Télam
