En su homilía por el Tedeum, el cardenal Mario Poli pidió por la unidad social, anteponer el bien común a los intereses personales e instó a “superar la idea de que el otro es un adversario o un enemigo” en la Catedral Metropolitana ante la mirada del jefe de Gobierno, Mauricio Macri.
Sin hacer referencia al intenso clima político, Poli mencionó que debemos “pensar en el servicio al otro y no en los propios intereses”. Y luego parafraseó dichos de Manuel Belgrano, prócer dilecto de la Presidenta: “Nuestros patriotas están revestidos de pasiones en especial de la venganza y es preciso que la destierren”, señaló.
“El Concilio dice que la conducción política hay que ejercitarla con olvido del propio interés y consagrándose con caridad y fortaleza al servicio de todos”, dijo Poli, en otro fragmento de la homilía.
En tanto, recogió un tema de preocupación para la Iglesia al hacer referencia a las desigualdades sociales: “Todos aspiramos a que se achique la brecha que separa las clases sociales”, indicó.
Y, siguiendo la línea de su discurso, pidió dejar de lado “el espíritu de anteponer los intereses personales a los del bien común”.