Por la incesante suba del dólar blue, los alimentos aumentarían 8% este mes

Por la suba constante que viene teniendo el dólar blue en las últimas dos semanas, las consultoras privadas ya corrigieron hacia arriba la proyección de los precios en alimentos y bebidas.

Un relevamiento efectuado por PERFIL reveló que las mediciones privadas estiman que en lo que va del mes ya estaría dando un 8% de aumento para la canasta básica, porque si bien el blue es un mercado menos voluminoso que el oficial, es el valor que efectivamente rige como referencia para acordar precios.

En relación con la primera quincena de julio, los valores en el rubro escalaron un 10%.

Entre los productos que más incrementaron su precio están la yerba, las pastas secas, el puré de tomate y el agua mineral, indicaron desde el Instituto de Consumo Masivo (Indecom). El titular de esa consultora, Miguel Calvete, explicó a PERFIL que el lanzamiento del dólar maíz explica el gran aumento que sufrieron productos como carne, lácteos y huevos.

“En alimentos, la inflación de agosto nos da un 8,4%”, agregó. Según este relevamiento, los precios crecieron un 2,1% en los primeros siete días del mes.

Este porcentaje estaría por encima de la inflación mensual general, proyectada en un 7,6%. Sin embargo, aclaró: “Esa es la proyección; después tenemos que ver cuál es el impacto de los aumentos que, por cuestiones que todos sabemos, se pueden dar luego del 14 de agosto”.

Según Indecom, las cifras para julio también arrojaron un incremento mayor en bienes de consumo básico que en el resto. Para alimentos, la inflación fue del 7,4%, mientras se calculó de un 6,9% a nivel general.

“El rubro de alimentos y bebidas no alcohólicas recuperó su tendencia al alza en las últimas semanas y se encuentra en torno al 7%, 7,8%”, afirmó a PERFIL Lautaro Moschet, economista en la Fundación Libertad y Progreso. Esto se debe, entre otras cosas, agregó, al impacto de los precios regulados, “entre los que se encuentran los colegios privados, la medicina prepaga, el transporte público y los combustibles”.

El economista consideró que “el aumento en el tipo de cambio será un factor fundamental, cuyo efecto ya se está viendo reflejado”.

Para Moschet, “la incertidumbre electoral provocó una caída en la demanda de pesos, la cual hizo disparar la cotización del dólar”. Si este comportamiento persiste la semana que viene, adelantó, las proyecciones podrían cambiar. “En la segunda parte del mes es probable que volvamos a tener un dato de inflación mensual por encima del 8%”, agregó.

Desde la consultora C&T observaron que el incremento de los precios de los alimentos durante las dos primeras semanas de agosto con relación al mismo período de julio ya fue de un 10%.

Las subas principales se dieron en carne, panificados, verduras y algunas bebidas, señalaron a este medio.

Por su parte, la consultora LCG también publicó un informe, en el que señaló que el precio de los alimentos subió un 2,2% en la segunda semana de agosto, y que en las últimas cuatro semanas se incrementó un 8,7%.

Según el mismo estudio, los aumentos de la segunda semana de agosto estuvieron liderados por la carne (4,7%), verduras (2,5%), productos panificados (1,9%), lácteos y huevos (1%) e infusiones y aceites, con un 0,4% y 0,1%, respectivamente.

En tanto, las frutas bajaron un 2%, y las comidas listas para llevar subieron un 1,5%.

Si se miden las variaciones durante las últimas cuatro semanas, en cambio, las verduras fueron las que más subieron (12,5%). Le siguieron azúcar (6,4%), aceites (4,2%), carnes (3,8%), lácteos y huevos (3,7%).

De acuerdo con C&T, otros rubros que experimentaron grandes incrementos a causa de la aplicación del impuesto país fueron los medicamentos y los electrodomésticos, que también tendrán un papel importante en los datos de agosto.

Por ahora, se esperan los índices oficiales del mes de julio. Tanto el Indec como el Banco Central decidieron posponer el informe y el Relevamiento de Expectativas de Mercado hasta después de las PASO.

Los consumidores, mientras tanto, se adaptan a los nuevos precios. Según Indecom, “los sectores más pobres expresan un incremento ostensible en la compra de snacks, alfajores o alguna colación en reemplazo de una comida principal, como la cena”.

A esta situación, que viven “cuatro de cada diez familias argentinas de la base de la pirámide”, se le suma la cada vez más creciente elección de segundas marcas y las compras fraccionadas que, según Calvete, “en el último año se multiplicaron por tres”.

Por otro lado, agregó el presidente de Indecom, los Precios Justos, si bien abarcan a más de 2 mil productos de consumo básico, tienen un impacto limitado. “Alcanzan a 8.500, 9 mil puntos de venta, pero tenemos más de 190 mil puntos, y, de esos, 60 mil se encuentran en la provincia de Buenos Aires”, concluyó.

Por eso, y debido a que los productos de Precios Justos barriales no se consiguen en la mayor parte del interior del país, “el 70% de la población de sectores medios o bajos” queda afuera, sintetizó.