El descubrimiento de una caja fuerte de "grandes dimensiones" dentro de la escultura de un dragón puso en el centro de la polémica a uno de los hombres fuertes del exgobernador bonaerense Daniel Scioli que siempre intentó mantenerse lejos de los escándalos: Walter Edgardo Carbone.
Oriundo de Lomas de Zamora y licenciado en Relaciones Internacionales, Carbone con sus 45 años, fue subsecretario administrativo de la Jefatura de Gabinete bajo las órdenes de Alberto Pérez. Ambos son investigados por la denuncia que presentó la diputada Elisa Carrió por el manejo de los gastos de campaña de Scioli. La firma del dueño del dragón aparece en varias de las facturas presentadas ante la Justicia.
La denuncia contra Scioli fue realizada en junio en la Justicia platense por la diputada Carrió, y la causa quedó bajo la UFI 11 a cargo del fiscal Álvaro Garganta con la carátula "lavado de activos y distintas defraudaciones a la administración pública".
En la presentación, la titular de la Coalición Cívica planteó el "evidente enriquecimiento ilícito de Daniel Scioli", y solicitó a la Justicia que "investigue" a varios exfuncionarios provinciales, como así también a la empresa estatal de agua ABSA y al Instituto Provincial de Loterías y Casinos. Además, se pidió al fiscal que indague sobre la "contratación fraudulenta de personal" en la construcción del Puerto La Plata, y sobre supuestas maniobras de "estafas y sobreprecios" en la obra social IOMA y sobre una cooperativa.
En diálogo con PERFIL, la legisladora Paula Oliveto Lago sostuvo que "todos los exfuncionarios de la gestión anterior deben rendir cuentas, algo que no hicieron durante toda la década K". "Necesitamos que la Justicia avance en esta investigación para que las mafias no vuelvan más a la provincia de Buenos Aires, ni a ningún otro lugar del país", recalcó.
"Ahora quieren hacernos creer que semejante estructura con candados era para guardar cloro. Yo desconozco cómo funcionarios con 30 mil pesos de sueldo pueden tener semejantes mansiones. No debemos dejar que desvíen el foco de la cuestión, la realidad es que la campaña de Daniel Scioli se pagó con la plata de los bonaerenses", agregó Oliveto Lago.
Datos llamativos. La esposa de Carbone, Silvina, trabaja en la Defensoría del Pueblo. Su prima Adriana Carbone, integró el Ministerio del Interior y Transporte hasta diciembre de 2015.
En septiembre de 2015, tres meses antes de abandonar el poder, Carbone armó la sociedad E-Revolution Commerce S.A. junto al comerciante Damian Adducci. La misma, según explica en su sitio web, se dedica a la venta de productos vinculados a la construcción y el hogar.
Previamente, en 2006, el exfuncionario tuvo un locutorio ubicado en la calle Salguero 365 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el que compartía con otro hombre vinculado directamente con el kirchnerismo y el sciolismo: el exdiputado del FpV Martín Cosentino Moreto, quien fue subsecretario de Relaciones Institucionales en la gestión de Scioli.
