Luego del escándalo que se generó con las dos concejalas de San Andrés de Giles que recibieron la vacuna rusa Sputnik V contra el Covid-19 de forma irregular ya que no son personal de salud, las dirigentes del Frente de Todos renunciaron a su cargo: "Lamento que algunos hayan aprovechado esta situación".
Se trata de la ahora ex presidenta del Concejo Deliberante de la localidad bonaerense, Laura Branchini, y su compañera de bancada, Mariana Cané, quienes presentaron este martes 26 de enero su renuncia tras los quejas y protestas de la oposición y vecinos.
El hecho salió a la luz luego de que la oposición denunciara que hubo 20 personas vacunadas en San Andrés de Giles que no son personal de salud y no figuraban en el plan de vacunación para recibir la dosis. Entre esas irregularidades, se destacó que hubo dos concejalas del oficialismo que se vacunaron.
Denuncian que vacunaron contra el covid a personas que no son personal de salud
Este martes, Branchini y Cané presentaron una nota al Concejo Deliberante con su renuncia. “Como ya expresé a mis compañeros de bloque, fui llamada porque una persona no respondía el llamado del vacunatorio. Me encontraba trabajando en la calle, como lo hago a diario, haciendo lo que sé hacer, y lo que seguiré haciendo, porque siempre entendí que mi función era mucho más que estar presente en el Honorable Concejo Deliberante”, explicó la ahora ex presidenta del Concejo.
En esa línea, agregó: “Lamento que algunas mujeres y hombres de la política local hayan aprovechado esta situación sin medir consecuencias personales ni humanas, difundiendo en medios nacionales una historia que no fue tal. Antes de escuchar mi versión en el ámbito que compartimos ya existían comunicados repudiando una acción que desconocían”.
“Aquellos que aún no me conocen, quizás duden de la transparencia y legalidad de mi vacunación, a todos ellos quiero pedirles disculpas, no pensé el daño que podía ocasionar, y ese fue mi error. Confíe en el criterio de las y los profesionales, y lo seguiré haciendo, pues son ellos los que a diario ponen el cuerpo”, concluyó.
Por su lado, Cané manifestó: "Dar un paso al costado es la mejor manera de despejar toda duda respecto a la campaña de vacunación que se aproxima. En ningún modo se trató de un acto de abuso de poder y que no obré, bajo ninguna circunstancia, de mala fe".
“Quiero pedir disculpas como ya lo hice oportunamente a toda la comunidad por el error cometido que desató un sinfín de presunciones, algunas malintencionadas y seguramente en busca de una ventaja política, que están muy alejadas de la realidad”, completó.
Concejales K vacunados en San Andrés de Giles provocaron "clamor y hartazgo social"
Desde la Municipalidad reconocieron las irregularidades en el proceso de vacunación y abrieron un "sumario administrativo": "Luego de un exhaustivo análisis de la situación y habiéndose detectado la vacunación por Covid-19 de personas no incluidas en esta etapa de la campaña de inmunización, se ordenó la sustanciación del sumario administrativo correspondiente a los fines de esclarecimiento de los hechos y la determinación de las responsabilidades de los agentes municipales involucrados".
El hecho había sido muy repudiado por los dirigentes de Juntos por el Cambio. En diálogo con RePefilAr, Mercedes Condesse, concejala de la oposición, aseguró que "hicieron uso del poder que detentan y de la función pública que cumplen obteniendo un beneficio que no les correspondía". "Se trata de personas jóvenes de 40 años, y menos también que no tienen ninguna indicación médica para recibir la vacuna, cuando sabemos que la vacuna tiene que ser recibida solo por el personal sanitario", agregó Condesse.
En ese línea, explicó que San Andres de Giles tiene 5 mil habitantes y "habían recibido solo 400 vacunas", por eso cuando la noticia salió a la luz generó "clamor social y hartazgo" en la sociedad.
EuDr CP