Siempre se habló de “la madre de todas las batallas”, pero en esta elección, como en pocas, la pelea por la gobernación de la provincia de Buenos Aires será clave. Es que dependerá en buena medida de cómo le vaya al candidato del Frente para la Victoria, Aníbal Fernández, frente a María Eugenia Vidal (Cambiemos) para saber qué ocurrirá con un posible ballottage por la presidencia. Asimismo, los votos que obtenga Felipe Solá (UNA) podrían colaborar con la elección de Sergio Massa. El territorio bonaerense fue el ámbito donde nació y creció el Frente Renovador, y donde el massismo espera hacer alguna diferencia.
De todos modos, en la Provincia no hay segunda vuelta y se gana con un voto de diferencia, por ello en Cambiemos se ilusionan con que haya un alto corte de boleta aunque el récord, de sólo 4,5%, lo ostenta desde 2011 Francisco de Narváez cuando fue “colgado” de la boleta de Ricardo Alfonsín.
Aníbal tiene a su favor los extremos de la papeleta: un Daniel Scioli fuerte y los intendentes que tratarán de apuntalar al jefe de Gabinete. El quilmeño hizo una campaña corta. En el entorno “naranja” deslizaron que temen que la boleta de Fernández les complique la elección. Por eso hoy habrá intendentes repartiendo listas con corte incluido.
Del otro lado, Vidal mide más que el propio Mauricio Macri y podría arrastrarlo al ballottage. La vicejefa fue la sorpresa en las PASO con una elección histórica. En Cambiemos armaron un ejército de 200 abogados por si se complica la fiscalización. El operativo legal supone que los abogados estarán cerca de los tribunales locales y los juzgados de paz listos con escritos prearmados, por si hay que denunciar irregularidades durante el escrutinio.
El peso de la Provincia
La provincia de Buenos Aires es la más importante, cuantitativamente, del país. Representa el 37% del electorado con 11,8 millones de votantes y es el lugar desde donde vienen militando dos de los tres candidatos presidenciales con chances. Para tomar dimensión de su extensión e importancia electoral, a nivel padrón, Buenos Aires equivale a 92 provincias de Tierra del Fuego.
Por otro lado, en la Provincia no hay ballottage y gana el que más votos consiga hoy. Con lo cual, el peso de la estructura de intendentes se jugará como nunca.