Reemplazar a un juez en caso de renuncia, muerte o destitución no es tarea sencilla o por lo menos no es rápida. Desde que el kirchnerismo llegó al poder, nombrar a un juez demora en promedio dos años y medio.
Las reformas propuestas no parecen ser suficientes para acelerar el proceso: en lo que va del año, el Consejo de la Magistratura sólo propuso 15 ternas, menos de la mitad que en el mismo período de 2007, informó el diario La Nación.
De los 58 concursos en trámite para designar nuevos magistrados, 19 tienen todos los plazos vencidos. El 23% de los tribunales, mientras tanto, está vacante: 203 juzgados quedaron a cargo de subrogantes, jueces de emergencia que la Corte Suprema declaró inconstitucionales, pero aceptó para cubrir los puestos en forma provisoria.
En promedio, el Consejo de la Magistratura tarda un año y medio para evaluar a los postulantes y redactar las ternas; el Poder Ejecutivo se toma diez meses más y otros dos la Cámara de Senadores, que debe dar su acuerdo al juez ungido por el Presidente. Previo a las reformas del kirchnerismo, el Gobierno elegía a los jueces directamente, con acuerdo del Senado: más rápido, pero sin debate.
" El oficialismo prefiere tener subrogantes, que no tienen las garantías constitucionales que tiene el juez, porque cree que son más presionables", sostuvo Ricardo Recondo, presidente de la Asociación de Magistrados de la Justicia Nacional, a La Nación. El Gobierno, entre tanto, tiene 21 ternas desde hace más de un año para las cuales aún no eligió candidato.
"Hay que acelerar el sistema, pero lo que dice Recondo no es cierto", refutó la secretaria de Justicia, Marcela Losardo, quien agregó: "Según él, los jueces son siempre presionados, subrogantes y definitivos. No es así. El juez tiene el poder de dictar sentencias y hace lo que quiere. ¿O todos los fallos le gustan al Gobierno?".
La presidente Cristina Fernández de Kirchner ya designó 55 jueces este año, pero le quedan por resolver 40 ternas si quiere cumplir con la promesa del ministro de Justicia, Aníbal Fernández, quien dijo que su objetivo era cumplir "el ciento por ciento" de las vacantes durante 2008.