Si “las despedidas son esos dolores dulces”, como cantan Los Redondos, la salida de Sergio Massa del Congreso estuvo marcada por una ceremonia en la tormenta. Más de 400 invitados coparon los palcos del recinto de Diputados, entre dirigentes massistas, sindicalistas, intendentes y funcionarios, al grito de “olé, olé, olé, Sergio, Sergio”.
En el palco oficialista se ubicaron distintos funcionarios nacional y bonaerenses de distintos colores políticos para recibir a la flamante presidenta de Diputados, Cecilia Moreau. Uno de los últimos en llegar fue el ministro de Interior, Wado de Pedro, escoltado por la camporista Paula Penacca.
Allí se ubicó con el ministro de Salud bonaerenses, Nicolás Kreplak, que habló en todo momento con su antecesor, el ahora diputado Daniel Gollán. También estuvo la ministra de Gobierno, Cristina Álvarez Rodríguez.
Por un momento, parecía que las banderas volvían a colmar los balcones del recinto. La Juventud del Frente Renovador intentó desplegar una, minutos antes del último ingreso de Massa. Pero quedó en la nada. En cambio, sí hubo, en el tercer piso una bandera argentina que, con letras negras decía “HONESTIDAD, MASSA, INTELIGENCIA”. Sin más.
La sesión empezó 45 minutos después de lo previsto. Esto tuvo que ver con la organización de los invitados y el protocolo. Mientras tanto, los diputados se saludaban y se acomodaban en sus bancas entre risas.
El que no festejó mucho fue Pablo Pereira, el violinista de la Cámara de Diputados, que esperó parado en el recinto más de una hora a que empezara la despedida para tocar el himno nacional. El tiempo parado se le hacía cada vez más largo. Se aburrió y empezó a tocar solo, nadie le prestaba atención.
"No hay nada para festejar": la despedida de la oposición a Massa y la bienvenida a Moreau
Con Massa en el recinto empezaron los cánticos y las arengas. Palco especial para Malena Galmarini y su hijo mayor. En un momento quedaron solos y la titular de Aysa lagrimeó de la emoción. El matrimonio político, que en 2015 eligió a Mauricio Macri antes que a Daniel Scioli, se enfrenta a un nuevo desafío político.
“En muchos temas podemos pensar distinto, pero todos tienen la pasión de construir un país mejor”, le dijo el tigrense a los diputados antes de despedirse. “En el debate electoral nos perlaremos, pero la sociedad espera que en algunos temas caminemos hacia adelante”, agregó y cerró: “Gracias a todos, de corazón”.
Con la sesión en transcurso, Máximo Kirchner apareció en el recinto. No había estado presente en la reunión del bloque oficialista donde se despidió en la intimidad justicialista a Massa. “Lo hicimos moquear”, comentó uno de los diputados que participó de ese encuentro en el tercer piso del Palacio Legislativo. Antes del llanto hubo una ovación de aplausos, que terminó con la Marcha Peronista.
Sergio Massa terminó su discurso y se sentó en el palco de invitados, al lado de Wado de Pedro. Mientras seguían los aplausos, llegó el abrazo más esperado. Máximo Kirchner caminó cuatro pasos y saludó Massa. Le dio un abrazo y, entre risas, le dijo habló al oído.
El que se reía era Wado de Pedro que se llevó una cachetada del ex jefe de bloque.
Así fue la emotiva sesión de despedida de Sergio Massa y la llegada de Cecilia Moreau
Juntos por el Cambio no apoyó
Con cara de pocos amigos, la oposición siguió la asunción de Moreau. Les contó por las diferencias internas, pero finalmente acordaron abstenerse y lo hicieron en conjunto, al igual que el Frente de Izquierda. “Tengo la convicción de que estamos asistiendo a una nueva interna de un Gobierno que, hasta ahora, mostró un rumbo errático, quebrantando las instituciones y privilegiando la agenda de Cristina Fernández por encima de la de todos los argentinos”, señaló la cordobesa Laura Rodríguez Machado (PRO), en diálogo con la prensa acreditada.
En tanto, el titular del bloque UCR, Mario Negri, se dirigió al “Superministro”: “La historia argentina está llena de providencias y se han multiplicado por dos los fracasos. No se puede errar en el diagnóstico”. “Hay que tomar el toro por las astas”, remarcó.
Javier Milei explicó las tres razones por las que bajó el dólar blue: "Massa, nada"
El encargado de recordar la difícil situación económica y política que enfrenta el Gobierno fue el jefe de la Coalición Cívica, Juan Manuel López: “Tuvimos la semana pasada escenas de pánico económico que hoy tienen repercusión institucional porque hoy estamos acá eligiendo una nueva autoridad como presidente de una de las cámaras, para que el ex presidente de esta cámara asuma el Ministerio de Economía”.
La decisión de Juntos por el Cambio de no votar la designación de Moreau le quita legitimidad política a la nueva conducción de la Cámara. Esto generó malestar en el Frente de Todos. “Es una guachada lo que hicieron. Teníamos un acuerdo que por cuatro meses nos acompañaban y después nos votan en contra”, reconoció una de las espadas políticas del oficialismo.
La respuesta a la oposición llegó de la boca de la propia Moreau en su discurso: “No voy a presidir la Cámara con mis hormonas, sí con mi cabeza y corazón”. A la mañana Negri había dicho que para presidir la Cámara debía controlar las emociones. Y así fue la respuesta de Moreau. Negri fue uno de los que tímidamente la aplaudió cuando hizo referencia a eso, otra fue Karina Banfi, con quién tiene un buen vínculo personal.
ar / ds