POLITICA
Paro Nacional

Solo un 12% de los argentinos confía en los sindicatos

Surge del último sondeo de la consultora Opinaia. Eternización en el cargo y sospechas de corrupción, los motivos según los encuestadores. El consuelo: comparten la baja performance con los políticos.

Luis Barrionuevo, Pablo Moyano, Héctor Daer y Juan Carlos Schmid
De izquierda a derecha: Luis Barrionuevo, Pablo Moyano, Héctor Daer y Juan Carlos Schmid | Cedoc

Son los encargados de negociar las paritarias y procurar así mayores ingresos para los trabajadores en blanco. Son los que, en la gran mayoría de los casos, presionan para obtener mejoras en las condiciones laborales. Sin embargo, las encuestas muestran que el nivel de confianza que los argentinos tienen sobre los sindicatos es muy bajo: apenas el 12% de los consultados tiene “bastante” o “mucha” confianza en los gremialistas.

Así surge del último sondeo nacional que hizo la consultora Opinaia. Una de las preguntas apunta al nivel de confianza de los encuestados de distintas instituciones de la sociedad civil. Los sindicatos están en el fondo de la tabla junto a los partidos políticos. Para consuelo del sindicalismo, no le va mucho mejor a la Justicia (solo el 16% de confianza) y a los empresarios de las grandes firmas (17%). En el margen opuesto, justamente, están los empresarios de las pymes, con el 48% de confianza. Comparten la cima del podio con las Fuerzas Armadas.

¿Por qué motivo los sindicalistas tienen tan mala imagen? Hoy se cumplió el quinto paro general de la CGT en apenas tres años y medio de gestión de Mauricio Macri (sexto si se le suma el que en abril decretó el Frente Sindical de Hugo Moyano). Una vez más, demostraron que tienen la capacidad, sobre todo si adhieren los gremios de transporte, de paralizar gran parte de la actividad económica del país con una huelga general. Una vez más, también, volvieron a mostrar las mismas caras de siempre, porque una de las cosas que caracterizan al gremialismo es su permanencia en sus cargos a través de los lustros o décadas. Y si no son los mismas caras, son los mismos apellidos. Esta semana, por ejemplo, asumió la nueva cúpula de la Juventud Sindical de la CGT. A cargo quedó Sebastián Maturano, hijo del titular de La Fraternidad. Y compartirá consejo directivo con Sergio Sasia, hijo del líder de Unión Ferroviaria. No solo los Moyano son una familia sindical.

Un análisis pormenorizado de la encuesta de Opinaia (encuesta online hecha entre el 21 y 27 de mayo entre 3.500 personas de todo el país), muestra que los niveles más bajos de aceptación los tienen entre los votantes de Cambiemos, con apenas un 4% de confianza. Donde mejor les va es entre los seguidores de Unidad Ciudadana y del PJ no kirchneristas, pero igual con niveles muy bajos: apenas un 20% y 19%, respectivamente. En la comparación por edad, entre los más jóvenes (entre 16 y 25 años) se da la imagen más alta (20%) y la más baja entre los más adultos (7% entre los de 46-55, 6% de 55-65 y 9% para los mayores de 66). En ninguna clase socioeconómica la confianza en los gremialistas supera el 14% que se registra entre los sectores de mayor vulnerabilidad. En las clases altas apenas llega al 10%.

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“La razón del desprestigio de los sindicatos reside en múltiples factores que sirven como anclaje cualitativo del fenómeno: desde la percepción de falta de democracia sindical, que implica una percepción de dirigentes eternizados en sus funciones, hasta la idea de una corrupción generalizada por parte de lo mismos”, sostiene Juan Mayol, director de Opinión Pública de Opinaia. Y continúa: “Esto contribuye a una sensación de lejanía del sindicalismo de los trabajadores a quienes representan, poniéndose muchas veces en tela de juicio el cumplimiento de sus funciones por parte de sus representados. Por otra parte, también contribuye a la lejanía la idea de que los dirigentes sindicales no son trabajadores que asumen eventualmente tareas de representación sino que devienen en sindicalistas profesionales, muchos de ellos con cargos hereditarios”.

No solo Opinaia muestra los números negativos del sindicalismo. Luis Costa y Asoc. mostraba para fin del año pasado que solo el 16% de los argentinos tenía una imagen positiva de los sindicatos y sus líderes. En este caso, quedaban arriba de los jueces (14%) y los políticos (10%), pero debajo de los empresarios (22%) y los periodistas (31%). En el tope estaban los intelectuales y científicos (80%), los ambientalistas (65%) y los ganaderos y agricultores (49%).

Esos números mostraban también que la imagen negativa de los sindicalistas incluso es inferior a la que tienen sus pares de otros países de la región. En Chile los gremialistas tenían una imagen positiva del 39%, en Brasil del 38%, seguidos por los colombianos, con un 31% y después los mexicanos, 26%.

“Los sindicalistas son valorados básicamente por sus bases, por los implicados directamente en sus negociaciones colectivas”, analiza Luis Costa. Y agrega: “Para el resto representan aspectos negativos de la política, como las sospechas de corrupción, sospechas de enriquecimiento ilícito y de poca democracia”. “Si observás, ellos están muy cerca de la imagen de los políticos, de modo que son un apéndice de ellos”, concluye.

CP