POLITICA
el gobierno desclasificara sus declaraciones juradas

Stiuso ganaba $ 18 mil y justifica sus bienes con herencias

Parrillitiene copia de las declaraciones juradas del ex director de Operaciones de la Secretaría de Inteligenciay espera el pedido del juez federal SebastiánCasanello

Denunciante. El legislador porteño Gustavo Vera pidió que se investigue el patrimonio de Stiuso.
| Sergio Piemonte

Oscar Parrilli ya tiene copia de las declaraciones juradas del ex director de Operaciones de la Secretaría de Inteligencia, Jaime Stiuso, de sus principales alfiles, y espera el pedido del juez federal Sebastián Casanello para remitir los informes a la Justicia en la causa en la que se investiga a las ex autoridades de la SI por supuesto enriquecimiento ilícito.

Entre los datos más llamativos de la declaración jurada de Stiuso se destaca que el ex jefe de los espías registra un sueldo oficial de $ 15 mil mensuales más $ 3 mil de premio, una cifra sospechosamente escasa. A pesar de su bajo sueldo oficial, registraría un crecimiento patrimonial sostenido, que el propio Stiuso declara y justifica en base al cobro de herencias de sus familiares en Italia, confirmaron a PERFIL fuentes con acceso a la información. Vera pidió que investiguen la pista que conecta a Stiuso con Italia.

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La investigación se originó por una denuncia de La Alameda, la ONG que lidera el legislador porteño Gustavo Vera. El martes, Parrilli lo citó a la sede de la Secretaría de Inteligencia para informarle que colaborará con la Justicia. En la mira no sólo está Stiuso, sino también el ex director de Contrainteligencia, Horacio Germán García, y uno de los jefes de división, Alejandro Osvaldo Patrizio, entre otros.  

Vera dijo a PERFIL que Parrilli le dijo que no todos los denunciados por La Alameda figuran como agentes de Inteligencia del Estado. De hecho, la mayoría de los accionistas y titulares de las compañías que la ONG tiene en la mira no están registrados en la SI. Sin embargo, el funcionario no descartó que pudieran ser agentes inorgánicos. La conversación fue prácticamente a los gritos. Mientras Parrilli le comunicaba que esperaba el pedido del juez federal para entregar la información patrimonial sobre los espías denunciados, tenía el volumen del televisor al máximo, señal de que sospecha que era escuchado. El funcionario aseguró a Vera que está dispuesto a ir hasta el final contra el nuevo enemigo público del Gobierno, otrora aliado central de los Kirchner para controlar los “daños” en la Justicia. El fiscal federal Ramiro González analiza la información desclasificada de la ex SIDE que Parrilli remitió el martes y en los próximos días definirá si imputa a Stiuso y sus hombres por presunto enriquecimiento ilícito. En su informe, Parrilli dio vía libre a la Justicia para que investigue los movimientos de dinero de unas cincuenta firmas relacionadas con las ex autoridades de la SI.

Denuncia. En tanto, el diputado del GEN Omar Duclós denunció al secretario de Inteligencia por “contratación discrecional” de nuevos agentes en la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), entre los que figuran militantes de agrupaciones kirchneristas.

 

El juez Casanello pidió legislar sobre espionaje

El juez federal Sebastián Casanello envió a la Comisión Bicameral de Fiscalización de Organismos y Actividades de Inteligencia los testimonios y la sentencia contra el almirante Jorge Godoy, ex jefe de la Armada, al que condenó el miércoles por espionaje a políticos, dirigentes y civiles. El magistrado pidió que se “adopten las medidas correspondientes para evitar, en lo sucesivo, la reiteración de prácticas como las que han sido objeto de este proceso”.

Godoy fue sentenciado por actividades de espionaje interno desde la base aeronaval Almirante Zar, en el sur del país,  entre 2002 y 2006.

El juez Casanello “recomendó” a los poderes Ejecutivo y Legislativo incorporar al Código Penal nuevos tipos penales que encuadren la conducta de los funcionarios que permitieran la realización de tareas de inteligencia prohibida. Godoy sólo pudo ser juzgado por incumplimiento de la Ley de Inteligencia.