El anuncio del retorno a las clases presenciales en la Ciudad de Buenos Aires a partir del lunes 31 de mayo reavivó la polémica entre Soledad Acuña, Ministra de Educación, y su par nacional, Nicolás Trotta, que insiste con su recomendación de mantener el esquema de clases virtuales en las zonas de alerta epidemiológica como el AMBA.
En este escenario, el ministro de Educación, Nicolás Trotta, aclaró que “la presencialidad no es una cuestión de deseo sino de responsabilidad y de analizar las variables epidemiológicas” y a modo de ejemplo citó que “la Ciudad de Buenos Aires triplica el indicador y la tasa de incidencia de Alemania para cerrar las escuelas”. Precisamente, el Gobierno impulsa la aprobación en el Congreso de un proyecto para delegar facultades de las provincias al Presidente y que éste pueda tomar medidas sanitarias a partir de un semáforo epidemiológico.
Con una lectura más política, Trotta se preguntó luego si “¿estamos frente a una decisión sanitaria o una decisión especulativa? ¿Quién maneja la agenda: Patricia Bullrich o el gobierno porteño” y chicaneó: “En la pandemia hay que escuchar menos a los encuestadores y más a los sanitaristas”.
Desde el gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta fue el encargado de dar los lineamientos educativos que regirán a partir de mañana en la Ciudad que implica el regreso a la presencialidad del nivel inicial y la primaria, con una alternativa bimodal en primer y segundo año del secundario y virtualidad para el resto de los años.
La Ciudad no tuvo clases en los tres días hábiles del período de confinamiento estricto y dispuso su recuperación presencial entre el 20 y el 22 de diciembre. La ministra de Educación del distrito, Soledad Acuña, reconoció que esa fue una decisión que “a muchas familias no les gustó” y reconoció que está en análisis la posibilidad de adelantar las vacaciones de invierno, aunque no pueden definir que sea la medida más efectiva por la situación sanitaria actual.
La funcionaria Soledad Acuña también se sumó al cruce de acusaciones y manifestó su “desesperanza” al ver que “se habla de realizar la Copa América en el país y se cuestiona la presencialidad en la educación”. En ese sentido, para Acuña “el futuro necesita a los chicos en la escuela, los chicos la necesitan hoy, entonces tenemos que tomar las decisiones que nos permitan construir ese futuro en las aulas”, concluyó.
¿Se adelantan las vacaciones de invierno?
“No estamos seguros de que adelantar las vacaciones sea la mejor opción”, fue la lectura preliminar que hizo conocer la ministra de Educación de la Ciudad Soledad Acuña en las últimas horas y que pone en duda un cambio en el calendario escolar como especula la provincia de Buenos Aires y que incluso fue consultado con los gremios.
Según comentó Acuña, “se puede cambiar la fecha de las vacaciones, pero después nos quedaría una segunda parte del año muy larga, por eso estamos analizando distintas opciones para acompañar la política sanitaria”.
La funcionaria explicó que por el momento “estamos analizando distintos escenarios con todo el calendario que en la Ciudad es extendido, porque son 196 días”.
