Un fiscal de experiencia que viene de criticar a Alberto F
Rívolo. La causa más emblemática que tuvo fue Ciccone. |
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Alfredo Izaguirre
El fiscal federal Carlos Rívolo es quien investiga junto a la jueza María Eugenia Capcuhetti el expediente caratulado como “homicidio calificado en grado de tentativa” cuyo principal acusado es Fernando Sabag Montiel, de 35 años. Ambos comparten turno por este año en las causas que ingresan por sorteo a la Cámara Federal y por la primera quincena de septiembre las denuncias penales donde intervienen las fuerzas de seguridad federal.
Rívolo cuenta con una vasta experiencia judicial, tuvo en sus manos la tragedia aeronáutica de LAPA de 1999 y la causa Ciccone, donde acusó al ex vicepresidente Amado Boudou de comprar la llamada “máquina de hacer billetes”.
El acusador público es titular de la Asociación de Fiscales y Funcionarios de la Nación (Affun), quien en los últimos días emitió un comunicado donde manifestó su “honda preocupación” por los dichos del presidente Alberto Fernández en razón del alegato de Diego Luciani y Sergio Mola en el juicio por la obra pública en la provincia de Santa Cruz donde la vicepresidenta está procesada.
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Rívolo colaboró con su par Carlos Stornelli en la instrucción de la llamada “causa de los cuadernos”, que en su momento encabezó el fallecido juez Claudio Bonadio, y que tras la elevación quedó sorteada en el Tribunal Oral Número 7 sin fecha de inicio.
Junto al juez Sebastián Casanello declararon la inexistencia de delito en la acusación penal contra Juan Grabois por la viralización de un video luego del conflicto de la familia Etchevehere por la estancia Casa Grande en 2020. Rívolo también imputó a Victoria Xipolitakis por el escándalo que protagonizó en un vuelo de Austral cuando la vedette permaneció en la cabina de la aeronave y operó sus controles.
Rívolo también impulsó la causa donde el juez Marcelo Martínez de Giorgi procesó a los peritos que buscaron inculpar a Marcos Córdoba, motorman de la tragedia de Once.
