POLITICA
la carrera electoral

Unidas para frenar la fuga de radicales al massismo

Lilita Carrió y Gabriela Michetti se juntaron hace dos semanas. Quieren llevarse “lo mejor” de UNEN a un frente con el macrismo.

Coincidentes. Son íntimas amigas desde hace años y hoy tejen una alianza entre el PRO y la UCR.
| Prensa Pro
Son confidentes y amigas. Tuvieron sus diferencias pero hoy están embarcadas en un destino común: intentar retener un sector de la UCR para evitar más fugas hacia Sergio Massa y, a la vez, reordenar a la oposición para crear un frente no peronista.
Gabriela Michetti se reunió hace dos semanas con Elisa Carrió en su departamento. La preocupación de ambas era premonitoria: la huida de los radicales hacia el Frente Renovador. “Hay que estar tranquilos Gabriela. Ya estamos de este lado Ernesto, Oscar, Mauricio vos y yo. Hay que esperar”, le dijo Lilita a la senadora del PRO.
Ernesto era Sanz (titular de la UCR y precandidato a presidente), Oscar era Aguad (diputado y quien anima la alianza radical-macrista en Córdoba) y Mauricio, claro, era Macri.
En la charla íntima Carrió agregó que, con la idea de no generar más conflictos, no se pronunciará en contra de Massa para no generar más fricción con el radicalismo. La chaqueña había expresado, en una nota con PERFIL, que aliarse con el ex intendente de Tigre representaba ir al “narco Estado”.
Paralelamente le confió que la intención sería llevarse “lo mejor” de UNEN a un frente común opositor que compita, con chances reales de llegar a la Casa Rosada, con el massismo y el kirchnerismo.
Michetti, por su lado, le dijo que no podía creer cómo los radicales podían “pegarse un tiro en los pies”. Como ejemplo, le transmitió que José Cano, el diputado radical que quiere ser gobernador de Tucumán y que se reunirá con Massa la semana próxima, le había expresado que maneja encuestas donde el 70% de su electorado votaba a Macri como presidente.
“Los que defendemos la República tenemos que estar unidos”, concluyó Lilita, palabras más palabras menos. La senadora del PRO le había confiado su bronca por los movimientos oscilantes de la UCR. Coincidieron en sus críticas al senador Gerardo Morales, quien el lunes abrió aún más la grieta en UNEN posando junto a Massa en su Jujuy natal. “Si lo van a hacer, que lo hagan bien”, dijo Carrió a sus colaboradores en referencia a las fugas.
Por otro lado, Michetti es íntima amiga de Sanz, y hasta comparten vacaciones. Desde hace meses viene intentando convencerlo de que lidere a su partido para que amplíe sus alianzas y no lo desborden los dirigentes provinciales.
Tras su lanzamiento en el Luna Park, Sanz la llamó a la ex vicejefa porteña y le reiteró que, en uno de los párrafos de su discurso, sostuvo la idea de “ampliar” el frente. La senadora sueña con sumarlo, junto a otros, y que, inclusive, sea el compañero de fórmula de Macri. “Sería la mezcla ideal, las obras de un ingeniero y la institucionalidad de Ernesto”, se la escuchó decir.
Por su parte, Carrió también mantiene un vínculo de afecto con Sanz y con el diputado cordobés, Mario Negri. Lilita no pretende irse al PRO sola ni romper con la UCR. Cree que es un momento donde se clarificarán las posiciones de los dirigentes de aquí a fin de año.  La amistad de Michetti y Carrió sigue siendo uno de los principales canales conductores entre el PRO y UNEN. Se respetan y sueñan con conformar un espacio común que “haga historia” y desaloje del poder al PJ. Por ahora no está claro que puedan lograr ese objetivo.