La falta de actualización en los presupuestos universitarios ha puesto a muchas casas de estudio al borde del colapso financiero, sobre todo teniendo en cuenta que en los tres primeros meses del año la inflación fue de 51,6%.
Pero a la falta de actualización de los recursos para el funcionamiento diario y pago de salarios, se suma ahora la fortísima suba de tarifas dispuesta por el Gobierno. Solo por citar algunos casos: la Universidad de Rosario pagó en enero del 2023 $ 20 millones por la tarifa de electricidad. En el último mes debió pagar $ 120 millones.
En el caso de la Universidad de San Luis, pagó en diciembre del 2023 $ 6 millones, la última factura debió pagar $ 27 millones. Las universidades no tienen tarifas especiales y el impacto presupuestario obliga que se evalúe la reducción de oferta de clases nocturna.
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El caso más paradigmático es el de la Universidad de Buenos Aires. Según señalan desde la comunidad educativa, la UBA tiene recursos para funcionar hasta el mes de mayo.
La Universidad de Rosario pagó $120 millones por la última factura de electricidad
Los gastos de funcionamiento de la UBA durante el 2023 fueron de poco más de $ 26 mil millones. Según las estimaciones, hoy debería estar en el orden de los $ 90 mil millones. Con todo, solo tiene asignado recursos para gastos corrientes por $ 20 mil millones, pese al aumento del 70% anunciado por el secretario de Educación, Carlos Torrendell. La inflación acumulada de enero de 2023 a marzo 2024 es de 325,1%.
Según ACIJ, el presupuesto universitario actual es el más bajo desde 1997. Para 2024, los recursos asignados al “Programa Desarrollo de la Educación Superior” (que es el principal programa universitario) es un 72% más bajo que en 2023.
Tampoco se verifica ninguna erogación en el programa de “Becas Progresar”. Tampoco hubo inversión en el rubro de la infraestructura universitaria.
Dentro del rubro “Desarrollo de la Educación Superior”, el ítem “Asistencia Financiera para el Pago de Salario Docente y Autoridades Superiores”, pasó de $ 496.934 en 2023 a $ 339.830 en 2024 con una caída del 31,6%. “Asistencia Financiera para el Pago de Salario del Personal no Docente”, pasó de $ 275.744 en 2023 a $ 197.669 en 2024. La caída fue del -28,3%.
Más impactante fue lo realizado por la Facultad de Ciencias Exactas (UBA), que desarrolló un sitio web con un contador en tiempo real de cuánto tiempo le queda a la facultad de funcionamiento con los recursos que cuenta. “48 días, 7 horas, y 29 minutos” al cierre de esta nota.
El próximo 23 de abril habrá marcha federal de docentes universitarios y alumnos. Las manifestaciones se darán en distintos puntos del país.
Si bien todos los gremios docentes y la comunidad educativa señala buena comunicación con Torrendell, distinto es el escenario con el subsecretario de Políticas Universitarias, Alejandro Álvarez, un dirigente proveniente de la JUP porteño de los 90.
Álvarez tiene mala relación con el CIN (Consejo Interuniversitario Nacional) y con los rectores.
De hecho se señala que va hablando mal de unos y otros, en las diversas reuniones que mantiene.
