Las denuncias por supuesta violación a las medidas sanitarias para contener el coronavirus durante el velatorio de Diego Maradona, que involucran al Presidente Alberto Fernández y a algunos de sus funcionarios, fueron desestimadas por inexistencia de delito por el fiscal federal Ramiro González. El 26 de noviembre del año pasado, una multitud se aproximó a la Casa Rosada para despedir al astro del fútbol.
El fiscal sostuvo que se trató de "permitir al pueblo despedirse de una personalidad tan significativa como fue la de Maradona, decisión que prima facie habría sido efectuada en vista al interés general, y por ende, no podría ser tachada de arbitraria o irrazonable”. A lo que agregó “que se ha hecho una excepción, por tratarse de una situación per se excepcional"
En un dictamen entregado al juzgado federal 2, la fiscalía propició desestimar cuatro denuncias unificadas en una sola investigación. Las presentaciones habían sido realizadas por Yamil Santoro y Antonio Fratamico (dirigentes de la coalición política Republicanos Unidos), a las que se sumaron otras por transgresiones a las normas, los tumultos, y organización defectuosa. Además de Alberto Fernández, se incluyen en las denuncias al jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y a la ministra de Seguridad, Sabina Frederic.
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Al respecto de organizar un acto de tal envergadura en el contexto de pandemia que atravesaba en aquel entonces el AMBA, el fiscal destacó: “lo cierto es que las autoridades decidieron igualmente desarrollarlo, tal vez previendo que una negativa a despedir los restos de una personalidad semejante, probablemente habría generado otros tipos de inconvenientes, inclusive de mayor entidad, con mayor violencia, y también desaconsejables desde el punto de vista epidemiológico".
El aquel momento el Presidente expresó que "si no hubiéramos organizado esto, todo hubiese sido peor” y agregó que “todo funciono bien”, hasta que la gente no pudo entrar a la Casa de Gobierno.
Los denunciantes también habían aludido a que "se había vulnerado el principio de igualdad ante la ley al habérsele conferido a la familia Maradona un trato diferencial al que recibe cualquier otra familia ante el fallecimiento de un ser querido”. Al respecto, el Fiscal argumento que "luego de efectuar un análisis integral de los hechos que motivaron la presente causa, surge un actuar por parte de las autoridades mediante el cual no se aprecia una finalidad de brindar un trato diferencial a la familia del difunto".
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La fiscalía descartó todos los delitos aludidos y pidió desestimar la denuncia y cuestionó la "judicialización de la política"."La judicialización de la política -más en este contexto- que se propone en estos casos, excede el ámbito válido habilitado por la jurisdicción del poder judicial y rompe el límite de una zona vedada para su intervención", analizó el fiscal.
Sobre el cierre de la denuncia presentada por la realización del velatorio de Maradona, el vicepresidente de Republicanos Unidos y precandidato a diputado nacional, Yamil Santoro, sostuvo que "es un claro precedente: nadie responde por ignorar las restricciones. Si el Presidente no es responsable por organizar eventos multitudinarios, nadie puede ser culpable por lo mismo". Y agregó: "Han consagrado la libertad para todos. El objetivo de esta denuncia era ni más ni menos este y logró su cometido”.
El fallecimiento del jugador y entrenador se produjo el 25 de noviembre de 2020 y al día siguiente fue velado en la Casa de Gobierno, donde una multitud concurrió para despedir a quien trajo al país la copa mundial de México en 1986, donde también fue consagrado como mejor jugador del mundo. Además de ser ídolo indiscutido de clubes como Boca y Argentinos Juniors, Maradona también lo es de los hinchas de todos los equipos nacionales e internacional.
MF CP
