Una hora de reunión. Despacho oficial bonaerense. Y una transición en marcha. Los principales asesores de María Eugenia Vidal y Axel Kicillof se reunieron hoy para encarar la segunda fase del traspaso de mando en la Provincia de Buenos Aires.
Se trata del vidalista Federico Salvai, jefe de gabinete bonaerense, y Carlos Bianco, mano derecha del gobernador electo y dueño del famoso Renault Clio con el que viajó Kicillof en su campaña.
En el encuentro, que las fuentes denominaron como “muy cordial”, acordaron que, a partir del lunes, arrancará el trabajo de los equipos técnicos propiamente dichos. Del lado de Vidal, el subsecretario de Coordinación, Emmanuel Ferrario, venía trabajando en los informes, área por área, para que puedan analizarlos los asesores de Kicillof.
En concreto, el interés está puesto en Hacienda y en la deuda. También, en los planes de infraestructura y en el área de modernización. Sin embargo, aún no están definidos los nombres de los futuros ministros bonaerenses, con lo cual todavía no hay contactos directos sino informes globales que Salvai le comentó a Bianco en la reunión.
Diputados. Paralelamente, Vidal recibió a un grupo de diputados provinciales, muchos que dejarán sus bancas en diciembre. Encabezados por el jefe del bloque, el radical Maximiliano Abad, la gobernadora les planteó allí: “Hay que trabajar para que desde la Legislatura se fortalezcan nuestros intendentes”.
La mandataria se refería a los 62 municipios que ganaron las elecciones en octubre y que serán parte de la base de sustentación de Juntos por el Cambios en territorio bonaerense.
También pidió, por supuesto, mantener a la tropa unida, una máxima con la que trabaja desde que perdió el comicio. Incluso la gobernadora lo habló con Mauricio Macri el jueves pasado en el despacho presidencial de la Casa Rosada.
En el encuentro de Vidal con los de Abad también hablaron los radicales Jorge Silvestre y Sandra París, en el mismo sentido: sostener la unidad para tener más fuerza como oposición.
Aunque al interior del PRO ya se desató una guerra por la conducción. Allí pelean intendentes y futuros ex funcionarios por tener el mando. “Si hacemos las cosas bien y defendemos lo que hicimos va a haber un buen 2021 y un gran 2023”, les dijo la gobernadora, según pudo reconstruir PERFIL. Una buena forma dialéctica y práctica de intentar sostener Juntos por el Cambio a futuro.
E.S / D.S.
