A pesar de la visita de sus mejores amigos oriundos de Puerto Madryn, la gobernadora electa no dejó huecos en su agenda y comenzó a delinear el Presupuesto 2016, la clave para entender cómo será su primer año de gestión.
Los dos puntos salientes serán conseguir fondos de Nación y de organismos internacionales para obras de infraestructura y una revisión del organigrama provincial por el que se reducirá un 20% la cantidad de cargos políticos.
El futuro ministro de Economía bonaerense, Hernán Lacunza, estudia la mejor manera de desarrollar el plan de infraestructura que armó junto a Vidal. Por un lado, cómo distribuir los $ 13 mil millones que acordó Vidal con Mauricio Macri, si es que llega a la Casa Rosada. De ese paquete para 2016 habrá obras para instalar cloacas en más de 1,5 millón de hogares bonaerenses y agua potable para otros 620 mil. Ese monto también alcanza el proyecto de corredores de Metrobús que armó Guillermo Dietrich para el Conurbano, más de mil kilómetros de rutas y las obras hídricas.
Paralelamente, Vidal está pensando en conseguir fondos del exterior para obras a largo plazo, como las que mitigan las inundaciones. Aunque están analizando las tasas de interés y cómo sería el esquema de pagos, la gobernadora electa sabe que el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo son dos puertas que debería abrir.
Mientras los sciolistas se negaron a mostrar los números del déficit fiscal que dejará el FpV (más de $ 15 mil millones), Vidal prepara una nueva ley de ministerios para acotar la cantidad de cargos políticos cerca de un 20%.
La idea, cuentan en el PRO, no es echar trabajadores sino reducir los cargos. “La estructura es muy amplia, no con una visión de recorte de gastos sino funcional. Para la toma de decisiones va a haber que unificar áreas”, explica a PERFIL uno de los futuros ministros bonaerenses.
En tanto, Vidal ya arma su gabinete. Justamente, para ejecutar el ambicioso plan de obras tentó a Edgardo Cenzón, ministro de Espacio Público porteño, quien podría mudarse a La Plata. También sumó a Roberto Gigante, uno de los hombres que llevó las cuentas de la Ciudad durante los últimos ocho años, para que trabaje como “ministro coordinador”. Si bien en Salud y Educación aún no están definidos los nombres, Vidal ya designó a Federico Salvai (ministro de Gobierno y su histórica mano derecha) y a Cristian Ritondo (Seguridad) como colaboradores. A ellos se sumarán Santiago López Medrano (Desarrollo Social) y la continuidad de Gustavo Ferrari, (asesor general).