“Después de recorrer toda la Provincia, puedo asegurar que las personas que están en situación de pobreza o que pierden su trabajo no son narcotraficantes”. Así respondió la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, a la afirmación de Axel Kicillof y otros integrantes del kirchnerismo de que la gente vende drogas por no tener empleo.
Sin mencionar a su principal contrincante electoral, Vidal criticó las declaraciones emitidas el domingo por el candidato del Frente de Todos, diciendo que decir que los pobres y desempleados son narcotraficantes es “estigmatizarlos”. En su opinión, los narcotraficantes de la provincia “tratan de convertir en soldaditos” a los chicos de los pobres y desempleados.
"El problema no es perseguir al pequeño consumidor, con la pérdida de empleo hay gente que se dedica a vender droga porque se quedó sin laburo, obviamente es un delito, pero no pasa por ahí el fenómeno”, había dicho Kicillof en una entrevista este domingo.
“Los narcos ponen de rehenes a los pobres, los desocupados, y los que menos tienen, ocupando sus barrios, sometiéndolos, exigiéndoles que escondan su droga, amenazando a sus familias, muchas veces convirtiéndose en prestamistas frente a la ausencia del Estado”, aseguró Vidal al ser entrevistada este lunes en Todo Noticias. Más temprano este lunes había asegurado que los traficantes de drogas "no son desocupados, son millonarios".
“El narco ocupa en los barrios pobres el lugar que debería ocupar el Estado”, lamentó la gobernadora. Agregó que el verdadero narcotraficante “está lejos de ser pobre, tiene muchos recursos y se aprovecha de esa pobreza y esa desocupación”. “Los pobres y desocupados son los rehenes de los narcos, no son narcotraficantes”, sentenció.
Vidal, que en infinidad de ocasiones se refirió a la lucha contra la droga en la Provincia de Buenos Aires emprendida por su gobierno, recordó que “en cada barrio que entramos y encontramos un búnker donde se vende droga, lo derribamos y detenemos al que vende, las primeras que salen a aplaudir, emocionadas, son las madres”. “Ellas más que nadie son conscientes del peligro que corren sus hijos, y son madres pobres y muchas veces no tienen trabajo”, afirmó.
D.S.
