"A Brasil tiene que ir Daniel, es quien puede convivir y pacificar las cosas con Jair Bolsonaro", le dijo Alberto Fernández a Santiago Cafiero sobre el destino en la Embajada de este país para el ex candidato a presidente. Horas más tarde, Daniel Scioli aceptaba la propuesta. "Voy a descomprimir y desestresar cualquier situación tensa que haya quedado", dice en diálogo con PERFIL. En los últimos días habló con ex cancilleres y empresarios que invierten en el país que se transformó en el principal socio comercial de Argentina. También toma clases de portugués y practica con canciones del cantante Roberto Carlos, además de mirar el documental Al filo de la democracia, que relata los escándalos políticos y judiciales que llevaron al actual presidente brasilero al triunfo.
—Después de los fuertes cruces, ¿cómo será el vínculo con Jair Bolsonaro?
—Tenemos una convicción profunda de nuestro destino común forjado en las bases de un gran acuerdo de Raúl Alfonsín y José Sarney. El vínculo no solo tendrá que ver con el intercambio comercial y turístico, sino también con cooperación en ciencia y tecnología, infraestructura, energía. Más allá de distintas visiones ideológicas, lo que tiene que prevalecer son los intereses en común. Debemos complementarnos, potenciarnos y mejorar las cadenas de valor de los distintos sectores. No se trata de quién vende más, si Brasil a Argentina o Argentina a Brasil, sino que más podemos vender juntos al mundo.
—¿Será una relación pragmática?
—Sí. Pragmático es ver qué nos conviene juntos de cara al contexto internacional que viene con una ola de proteccionismo. Le voy a dar a la Embajada un perfil muy dinámico y activo. Voy para descomprimir, desestresar cualquier situación tensa que haya quedado con Bolsonaro, y dar lugar a que tengamos la mayor armonía posible en nuestro vínculo.
Alberto confirmó a Solá y Scioli tras una reunión con diputados de Brasil
—¿El presidente de Brasil tendrá la misma visión pragmática y armoniosa a la que usted ahora apuesta?
—Bolsonaro fue muy claro en cuanto al pragmatismo que le quiere dar a la relación con la búsqueda de nexos en común. Alberto también dijo que debemos dejar atrás los desencuentros, y priorizar las coincidencias. Hay interés de los dos lados.
—¿Se puede desideologizar la relación si el presidente electo reclama por la inocencia de Luiz Inácio "Lula" Da Silva? ¿No es esto una traba para el nuevo vínculo al que apuestan?
—No, va a prevalecer la búsqueda de los intereses en común y poder seguir avanzando con acuerdos. Alberto dejó en claro que tenemos que ser respetuosos de la voluntad de los pueblos, de la institucionalidad y el respeto tiene que ser la base común. Eso define lo que viene ahora y es la impronta que le voy a dar.
—En el gobierno brasilero hay distintas posiciones sobre la política exterior, la de el presidente y su hijo que es antiglobalista, la de los militares que buscan preservar el vínculo con Argentina y la neoliberal. ¿Con quiénes va a tratar?
—Voy a tener diálogo con todos los sectores.
—Mirando al Mercosur, Bolsonaro busca bajar los aranceles externos. ¿Cuál será la posición de Argentina?
—La baja de aranceles o los acuerdos Mercosur-Unión Europea son temas complejos que van a requerir la evaluación que se haga desde Cancillería. En el seno de los países europeos hay mucha discusión con respecto a esto, nosotros tenemos que buscar de qué manera podemos conquistar nuevos mercados. Necesitamos dólares, generar puestos de trabajo, bajar la pobreza y luchar contra el hambre. Eso se genera con recursos genuinos promoviendo las exportaciones, voy a estar al frente de eso.
—Habla inglés, francés e italiano, pero no portugués. ¿Está aprendiendo el idioma?
—Es un idioma que venía pensando incorporar hace tiempo. Tomo clases y las acompaño escuchando canciones de Roberto Carlos en portugués que me hacen acordar cuando era chico y estudiaba inglés con canciones de Frank Sinatra. Con la facilidad que tengo con los idiomas no voy a tener problemas.
MC
