El juez de la Corte Suprema Raúl Eugenio Zaffaroni admitió hoy que fue un "error político" haber permitido la salida de presos con la agrupación Vatayón Militante que el Gobierno enmarcó en un plan cultural para la reinserción social. Además advirtió que "hay que evitar el escándalo".
"No hay que quemar las banderas, hay que tener cuidado de no dar ocasión al escándalo", señaló Zaffaroni al defender las salidas transitorias de reclusos en el marco de un "sistema progresivo".
El juez del máximo tribunal observó como un "grave riesgo" que la repercusión por la salida de pesos que cumplen condenas graves, como Eduardo Vázquez o Rubén Pintos acusados por los crímenes de Wanda Taddei y Gonzalo Acro, incentive a algún legislador a reformar el sistema de salidas.
"Que a nadie se le ocurra transformar o abolir el régimen de salida transitorias de semilibertad", pidió Zaffaroni y recalcó que el "sistema es progresivo y funciona como anticipación a la libertad condicional".
El juez de la Corte Suprema también indicó que se trata de "salidas que se hacen con custodia, se autorizan conforme a los reglamentos, la autoridad penitenciaria y los jueces", y explicó que se adjudican "como premio como conducta ejemplar, estas son puntuales, sale y vuelve siempre con custodia".
Tras aclarar que "un procesado no puede estar en peor situación que un condenado", Zaffaroni puntualizó que en el caso de las salidas promovidas por la agrupación kirchnerista Vatayón Militante "no ha habido irregularidad reglamentaria".
"Pudo haber una imprudencia, un error político", interpretó el juez de la Corte y analizó que "los medios pueden hacer un escándalo de cualquier cosa y hay determinadas cosas que no se deben hacer para evitar el escándalo".
Zaffaroni también se quejó de las declaraciones de quienes denuncian este tipo de actividades, como es el caso del abogado y ex apoderado de de la fundación de Madres de Plaza de Mayo, Sergio Shoklender, quien advirtió sobre la supuesta intención de crear "una fuerza de choque con presos", a lo que el juez señaló que esos dichos eran "barbaridades". "Estamos acostumbrados a oír ese tipo de cosas",agregó.