Fue una de las artistas que cerraron la edición 2023 del Lollapalooza, en la que a su vez fue su primera actuación en Argentina. A sus 21 años, Billie Eilish era de las cantantes que generaron muchas expectativas entre sus fans locales para ver cómo era su performance en vivo. Basta recorrer los hashtags con su nombre para acceder a videos de todo tipo y calidad que registraron lo que fue su actuación debut en Argentina.
Pero fuera del Lollapalooza, Biellie Eilish tuvo tiempo para conocer el Museo Nacional de Bellas Artes. Allí la cantante no llegó sola sino que fue con su madre y su padre, Maggie Baird y Patrick O’Connell, y su inseparable hermano, también músico, Finneas O’Connell. Es un secreto qué motivaciones tuvo la cantante para elegir dicho museo, de hecho la visita al Bellas Artes estuvo enmarcada en ciertas condiciones de privacidad pedidas por el equipo de Eilish.
Lo que sí se sabe es que no fue un vuelo rasante sino que estuvieron un poco más de hora y media en el museo y recorrieron las salas de la planta baja y del primer piso, espacios donde se exhibe la colección permanente del Bellas Artes. Y Eilish y su familia tuvieron de guía a Andrés Duprat, director del museo. La única foto pública de esta visita es la de Billie Eilish posando en la sala 16 –llamada Colección Guerrico–, que agrupa sesenta y nueve de las piezas donadas por la mencionada familia, que incluyen cuadros, esculturas y muebles.
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Tendencia. Aunque pueda llamar la atención que una cantante como Billie Eilish quiera visitar un museo argentino, no es algo inusual aunque por seguridad esas visitas suelen ser privadas y recién difundidas cuando el artista dejó del lugar, incluso el país.
En los años 90, Sharon Stone estuvo en Argentina en un momento de esplendor de su carrera como actriz. En su caso, ella fue al Museo Nacional de Arte Decorativo porque estaba interesada en un tapiz que sabía que estaba allí expuesto. De su paso por ese museo hay una dedicatoria en el libro de visitas.
En 2016, Ricky Martin estuvo varios días en Buenos Aires y un mediodía preconcierto estuvo recorriendo el Malba. En su caso, horas después él mismo publicó una foto en una obra interactiva.
Cindy Crawford, quien vino al país como embajadora de una marca de relojes, contrató una guía por dos días y especificó que, en su caso, era prioridad visitar la tumba de Evita, en el cementerio de la Recoleta.
