Una obra y un costo millonario. Los reyes de Holanda quedaron en el ojo de la tormenta tras estrenar un palacio esta Navidad, el cual remodelaron con un costo de US$ 72.200.205, generando un gran malestar en el Parlamento holandés por considerarlo demasiado alto.
Guillermo y Máxima se mudaron a este palacio del bosque neerlandés llamado Huis ten Bosch, que es del siglo XVII y que requería, ante todo, la retirada de recubrimientos de amianto, que contiene minerales dañinos para la salud. Es esta la primera gran mudanza para las tres hijas de Máxima, las princesas Amalia, Alexia y Ariane, quienes desde su nacimiento vivieron con sus padres en Villa De Eikenhorst, en Wassenaar. Según relatan, las obras terminaron costando más de lo que se tenía previsto. El Ministerio del Interior, responsable de las obras, tuvo que salir en defensa de los gastos, frente a un presupuesto original que era de 59 millones de euros.
Cambios. Para Guillermo de Holanda esta será una nueva etapa y un viaje de regreso al lugar donde vivió su infancia: en 1980 su madre accedió al trono y se trasladó a los pocos meses al lugar en compañía de su padre, el príncipe Calus, así como sus hermanos Friso (muerto hace dos años) y Constantino. Huis ten Bosch es propiedad del Estado holandés, y está a seis kilómetros de la residencia actual de Guillermo y Máxima, quien ya ha dicho que extrañará su antigua casa. “El lugar donde hemos formado una familia”, graficó. Guillermo también mostró su melancolía por la villa. “Hemos pasado 15 años maravillosos”, dijo. Allí la familia real ha residido desde 2003, en un inmueble que dispone de un amplio jardín, con la planta baja acondicionada para recibir a las visitas, y un primer piso privado.
Holanda: el increíble festejo de cumpleaños el rey Guillermo junto a su familia
La familia real fue también noticia la semana pasada, cuando brindó el tradicional saludo navideño. En esa oportunidad, se pudo ver a la reina posando junto a su esposo y sus hijas. Tomando todas las monarquías europeas, fueron los últimos en hacerlo y llamaron la atención por sus gestos adustos. Esto responde a una intención que tienen desde la institución en mostrarlos más cercanos al pueblo. Por ese motivo, optaron por una imagen donde se puede ver a los cinco con vestimentas sencillas, de colores neutros y sin ornamentos ni joyas. Para cerrar, desearon “Feliz Navidad y un próspero Año Nuevo” en diferentes idiomas.
Otras polémicas. En 2010, Guillermo y Máxima compraron una casa de verano en Mozambique y ese hecho provocó críticas. Y no sólo por la compra en sí, sino por la suma que ocasionaba al Estado holandés los gastos en seguidad de la familia real en caso de que pasaran allí algunos días. Luego se supo que la residencia fue abandonada por un agente inmobiliario que tenía una cuenta en un paraíso fiscal y eso activó la venta de la propiedad. Luego los reyes compraron una villa de lujo en Kranidi, Grecia, que costó US$ 5.156.527. Y las críticas fueron porque la compra se hizo durante la debacle economica griega y se consideró impropio de la monarquía tomar ventaja de esa crisis.